La cocina es un espacio que abre un sinfín de posibilidades, en la que cada día tenemos la oportunidad de hacer unas preparaciones increíbles y que el paladar siempre agradecerá ese tipo de atractivos. Como estamos en una situación de encierro por la pandemia del coronavirus, hay algo que se ha ido diversificando en muchos hogares y es el hecho de cocinar, un hábito que a pesar de común, muchas veces genera aburrimiento y hasta nos ponemos vagos buscando la facilidad. Pero ahora te traemos un delicioso pollo frito que además de ser sencillo, te quedará perfecto por esta receta que te mencionaremos el día de hoy.
El pollo frito suele ser una de las comidas que todos queremos incluir, pero que casi no hacemos mucho. La mayoría de las veces lo hacemos a la plancha. Utilizamos las alas del pollo, preparamos guisos, pero como que le tenemos miedo al aceite. Deja atrás esa idea y suma un pollo frito de diez puntos en el que te ganarás el premio mayor por lo delicioso y crujiente que te quedará. Ha llegado el momento de desvelarte los detalles para que te sorprendas a ti y a los tuyos.
Un encuentro entre familias con el pollo frito
Sin duda alguna, cuando hablamos del pollo frito no podemos dejar a un lado que la comida se hizo para compartir y degustar lo bueno y maravilloso que hay en ella. Un encuentro entre sabores donde todos los miembros de la mesa tengan la oportunidad de llevarse a su boca una pieza crujiente, jugosa y con mucho sabor para poner a volar todos los sentidos.
Y es que, muchas personas suelen afirmar que el pollo frito es fácil, en cierta forma lo es, pero hay que saber cómo cocinarlo para quede perfecto y que no te quede crudo, cosa que es desagradable. Nuestros consejos te llevarán a ser el mejor cocinero sin ser un profesional.
La delicia de un plato mundial
El pollo frito es tan internacional que en muchos países lo hacen, y cada persona pese a utilizar ingredientes similares le pone su toque para darle un sabor diferente y que sirva para amenizar el momento. Esto es lo magnífico que tiene este mundo de las culinarias, que con un producto básico y esencial en el hogar se pueden hacer increíbles recetas que seguramente no tenías en mente.
Y no sólo es un pollo frito, también juega un rol esencial los condimentos que uses y otros alimentos para lograr esa perfección que en la cocina es posible. Debes saber que tu amor por la comida es única, y el secreto de todo radica en las manos y en la energía que le pongas. Ponlo en práctica que tú puedes con eso y mucho más.
Un toque mágico para el pollo frito
En la cocina todas las personas tienen una magia, es un encanto que los hace únicos, y esa más que todo el aura de quien cocina. Si tú cocinas estando molesto, la comida no te quedará bien, pero si estás feliz, eso se los trasmites a lo que estás haciendo y está más que garantizado el éxito de la preparación.
En el pollo frito funciona igual, es rápido, sencillo, sin complicaciones, pero este tipo de detalles que están asociados a la intención que tengas de darle un pollo frito a los tuyos será crucial para los resultados. También hay factores con el aceite y el tiempo de cocción, que te vamos a describir más adelante.
Haz un pollo frito como los dioses
Seguramente te vas peguntar el motivo de este pollo frito como los dioses, y es que, los dioses tuvieron el poder de hacer de todo, en cada uno de sus ámbitos, y el control que tenían de las cosas era algo increíble. La misma historia lo dado por hecho, y es por eso que hacemos un paralelismo con la cocina.
El objetivo dentro de esta preparación del pollo frito es que quede crujiente, con buen sabor, textura en boca, y bien cocido, son aspectos relevantes que debes mentalizarte, y que con este proceso de elaboración tienes el camino más que avanzado si en algún momento tienes dudas. Casi todos hacemos pollo frito, pero como creemos que se hace, hoy sabrás cómo se hace de verdad.
Ingredientes
Lo mejor de este pollo frito es que es un alimento de bajo costo, así que no tienes motivos para decir que no a la receta y apuntarte un atractivo como este que vendría de lujo en un almuerzo familiar. Es importante destacar que la mayoría de los productos lo puedes tener en casa, ya que precisamente son de uso cotidiano, y los que no tengas, puedes te echar una paseadita por la tienda y asunto arreglado. Esto es lo que necesitas para lograr el mejor pollo frito de tu vida.
- 1kg de alitas de pollo
- 1 vaso de harina de trigo todo uso
- 2 vasos de pan rallado o molido
- 1 cucharadita de las especias que elijas (cayena o chile en polvo, pimienta negra molida, ajo y cebolla en polvo, paprika)
- 1 huevo y 200ml de leche
- Sal y pimienta
- Aceite para freír
Preparación
Iniciamos esta receta de pollo frito, mencionándote que debes limpiar y cortar las alitas del pollo. Te apoyas con un cuchillo que tenga buen filo para facilitar las cosas. Pero claro, cuidado de no cortarte las manos. Posteriormente procedes a cortar las articulaciones del pollo. Las cosas que no te sirvan las vas retirando, pues la idea es que esté limpio el pollo. Algunos otros pedazos de pollo pueden servir por ejemplo, para hacer caldo que sería útil para otras recetas.
Seguidamente tienes que preparar el rebosado exterior. Para ello, colocas huevo y leche en un plato que sea relativamente hondo y bates los dos productos. Cuando notes que tienes una mezcla un poco color crema y sin grumos del huevo la dejas de batir. Más adelante comienzas a hacer el empanizado. Pones un poco de harina, el pan rallado y las especias que sean de tu preferencia. Mezclas a la perfección con la ayuda de tus manos y ya viene la parte más exquisita.
Más detalles sobre el pollo frito
Cuando tengas listo el empanizado que utilizarás para el pollo frito, tienes que pasar las alitas por la mezcla de harina, pan rallado y especias, y posteriormente en la que tienes en el plato con huevo y leche. Este proceso tienes que repetirlo dos y tres veces. Lo que queremos es que quede bien impregnada la pieza del pollo. Una vez hayas hecho este paso, reservas las piezas en un plato y la metes a la nevera por un tiempo aproximando de 50 minutos.
Con esto lo que harás es que el empanizado se asiente aún más y los sabores puedan penetrar la piel del pollo. Para freír debes calentar muy bien el aceite y y utilizar abundante aceite. Debe estar caliente, pero sin exagerar para que no se te queme el pollo frito. La perfección hará parte cuando notes el doradito y el crocancia de la pieza.
Acompañamiento
Lo bueno del pollo frito es que es una comida versátil en la que tenemos la posibilidad de sumar muchas cosas para acompañar. Dentro de los alimentos más destacados, puedes añadir un rico arroz blanco, que podrías darle un sabor a ajo. Para ello, pones a ahogar en aceite, un diente de ajo picadito y cebolla picada, y le colocas tu arroz y el agua.
Otra de las alternativas que te sugerimos son unas papas gratinadas, así como también una buena ensalada de vegetales. Si no tienes ánimos de estos productos anteriores, un trozo de pan, y sumar unas salsas de tu preferencia le vendría de lujo. Es cuestión de gusto, así que el pollo frito puedes degustarlo como desees en el momento.
