A lo largo de las últimas décadas, hemos visto a decenas, quizás centenares de rostros aparecer en la televisión y esfumarse luego. Presentadoras a las que perdemos de visto, colaboradores que no vuelven a dar señales de vida, famosos de tres telediarios…Y llega un día, años después, en el que nos preguntamos, sin saber muy bien por qué, ¿y qué habrá sido de Fulano o de Mengano?
Eso mismo nos puede pasar con Miriam Díaz Aroca, que durante dos años presentó “Un, dos, tres” junto con Jordi Estadella. Ella encargaba de contabilizar las respuestas acertadas, dirigir la fase de Eliminatoria y participar en números musicales en la subasta. No fue aquel su primer trabajo en televisión. Esta madrileña, nacida en 1962, ya tenía una notable experiencia cuando empezó a colaborar con Jordi Estadella.
En 1987 debutó en “Por la mañana”, el magacín matinal que presentaba Jesús Hermida en TVE. De hecho, Miriam fue una de aquellas “Chicas Hermida” que dieron sus primeros pasos en televisión de la mano de dicho presentador. Un año estuvo en el programa de Hermida, y en 1989 ella misma se puso al frente de “Cajón desastre”, un programa de concursos, juegos y canciones dedicado al público infantil.
¿Y qué fue de ella desde que dejó de salir en “Un, dos, tres…”? Lo cierto es que no ha parado desde entonces.
3Fundación Elígete
Más allá de su ajetreada carrera, Miriam Díaz Aroca es una persona comprometida con el mundo que la rodea. Desde hace unos años es presidente de la Fundación Elígete, “que comenzó enfocado contra el maltrato de violencia de género, como un movimiento muy inspirador, motivador, exento de juicios, de críticas, de dolor, con un enfoque de puedes hacerlo, elígete, porque nadie va a venir a hacerlo por ti”.
La fundación se define en su web como “entidad de acción social sin ánimo de lucro, nos centramos en ayudar a identificar patrones tóxicos normalizados, mostrando la realidad de manera constructiva y provocando reacciones transformadoras. Utilizamos la escena teatral como vehículo para sensibilizar y transmitir nuestro mensaje a todo tipo de público”.
“He tenido momentos de mucha ebullición y de trabajar mucho para afuera, pero llega un momento que la vida te pide que pares un poquito para mirarte por dentro y que te escuches. Fue entonces cuando me di cuenta de que podía ser muy útil a los demás compartiendo todo lo que la vida me había dado y decidí ponerlo al servicio de los demás”, ha dicho Miriam sobre su implicación en actividades benéficas.
