No solo con Jesús Castro: La prepotencia de Jordi Cruz como jurado de Masterchef

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La polémica es el plato del día a día en la vida de Jordi Cruz. Este chef y jurado del programa de cocina Masterchef ha sido el protagonista de muchas escenas deplorables, en las que ha tratado a sus concursantes con la suelda del zapato. Y no solo a ellos, también a los becarios con los que cuenta en su restaurante.

Aunque no sucede constantemente, Jordi Cruz tiene sus días buenos en los que mantiene un buen trato con los concursantes. A pesar de ello, y sin tener en cuenta que no trata con profesionales, su nivel de exigencia es extremadamente alto, y si solo fuera eso, pero va mucho más allá. Y es que no duda a la hora de ser realmente despectivo con muchos de los platos que llegan a su mesa. A continuación, las peores situaciones protagonizadas por el chef y jurado de Master Chef.

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El caso león come gamba

leon come gamba

Aunque sucedió hace varios años, seguramente no habrás olvidado del caso de Alberto, el concursante que presentó un plato titulado «León come gamba», que fue objetivo de las críticas más duras de los jueces de MasterChef, sobre todo por parte de Jordi Cruz. Debido a la prepotencia que tanto le caracteriza, tuvo que presentar sus disculpas públicamente para calmar los ánimos de los espectadores. Y es que la forma tan agresiva verbalmente con la que trató al concursante no fue del agrado de nadie.

Por ello, pidió disculpas a quien se hubiera sentido ofendido, pues su intención y la de sus compañeros, que a veces también tienen lo suyo, no fue la de ofender a nadie. Eso sí, como no podía ser de otra forma, no todo fueron disculpas. Claramente tenía que excusarse: «Masterchef’ es el ‘talent show’ de cocina más duro del mundo por una razón». En base a ello, asegura que solo tratan de mostrar lo que pasa en una cocina cada día.

«Todo lo que sucede en un restaurante, sobre todo la exigencia de unos clientes que quieren ver cubiertas toda sus expectativas. Nos parece que lo mejor que podemos hacer por todos los que quieren ser cocineros es mostrarles la realidad, la cultura del esfuerzo, el trabajo y la superación. Y también debemos mostrar un respeto por las 14.875 personas que se presentaron como candidatos y no entraron. A los 15 que están tenemos que enseñarles todo lo posible y exigirles lo máximo sobre todo en las pruebas de eliminación«.