Una granjera australiana ha recuperado una de sus ovejas que hace siete años escapó de su finca durante los incendios que en 2013 arrasaron parte del país. Gracias a su regreso, la mujer cuenta con una cantidad considerable de lana extra, ya que nadie ha esquilado al animal durante todo este tiempo.
Alice Gray de Dunalley, Tasmania, se encontraba confinada junto a su familia en su granja cuando vieron entre la maleza un bulto blanco. El marido de la granjera salió de la casa para inspeccionar y descubrió que se trataba ‘Prickles’, la oveja perdida de la familia.
«Mi marido gritó para avisarme de que era Prickes, que la había agarrado y que necesitaba ayuda”, comentó Gray a ‘ABC Radio Hobart’.
La mujer señalo que su familia ha organizado un concurso para que los vecinos de la localidad adivinen el peso del animal antes de cortarle la lana acumulada durante los años.