Polémica en Francia tras conocerse que se ha indemnizado al único terrorista superviviente de los atentados de París

El estado francés se ha visto obligado a indemnizar a Salah Abdeslam, el único superviviente de los comandos yihadistas que perpetraron los atentados de París el 13 de noviembre del 2015, que acabaron con la vida de 131 personas. La justicia le ha condenado a pagarle 500 euros porque el grado de vigilancia al que se le sometió no era legal, aunque el terrorista se ha negado a cobrarlo.

La periodista Elsa Vigoureux, del semanario ‘L’Obs‘, fue quien reveló la noticia de la indemnización en su libro ‘Le Journal de Frank Berton’, dedicado al abogado del terrorista, aunque no ha sido hasta ahora cuando la prensa se ha hecho eco de la noticia cuando se ha desatado la polémica.

Según ‘Le Figaro‘, el Tribunal administrativo de Versalles consideró ilegal la decisión de imponer una vigilancia ininterrumpida al preso con cámaras, tanto de día como de noche, con una única mampara para preservar su intimidad.

Fue el ministro de Justicia, Jean-Jacques Urvoas, quien abogó por este sistema de vigilancia sobre presos en situación de aislamiento, porque en caso de fuga o suicidio se desataría un gran debate entre la opinión pública. Sin embargo, el abogado de Abdeslam denunció la videovigilancia como una violación grave de la libertad individual de la vida privada de su cliente.

La demanda fue desestimada inicialmente por el Tribunal Administrativo de Versalles y, posteriormente, por el Consejo de Estado, según recoge ‘La Vanguardia‘, aunque más adelante el propio Ministerio de Justicia se dio cuenta de que la videovigilancia era ilegal dado que no se sustentaba en ninguna ley, por lo que se preparó el marco normativo, con un texto legislativo que se adoptó el 21 de julio de 2016.

En ese contexto, y tras un nuevo recurso de Berton que sí salió adelante, el Tribunal de Versalles impuso la obligación de indemnizar al preso, alegando que cuando se llevó a cabo la videovigilancia de Abdeslam, no era legal.

Salah Abdeslam fue detenido cuatro meses después de los atentados de París. El 18 de marzo de 2016 fue arrestado en Bruselas, país que poco después lo entrego a las autoridades francesas. El 27 de abril era encerrado en la prisión de Fleury-Mérogis.

El juicio por los atentados de París se celebrará el año próximo.