Los resultados electorales del 26-M consolidan la primera opción que siempre ha manejado el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, de repetir con un Ejecutivo en solitario de mayoría progresista.
Así lo apuntaron fuentes de la Ejecutiva socialista, razonando que la representación de Unidas Podemos en el Parlamento no le garantiza al PSOE la gobernabilidad y, además, tampoco ha resultado ser una fuerza «decisiva» para otros gobiernos autonómicos o municipales de calado.
En Ferraz trasladan que la «debacle» de Podemos hace que Iglesias ahora no pueda exigir más que ser «vicepresidente de su comunidad de vecinos», bromean en la sede socialista.
En el PSOE alejan así cada vez más la posibilidad de que la formación de Iglesias entre en el Ejecutivo central, máxime cuando, recuerdan, con ellos solos no bastan, sino que necesitan a más partidos y no pueden meter a todos en el Gobierno; y, además, cuando la condición de otros partidos para apoyar la investidura de Sánchez es que Podemos no forme parte del Gobierno.
En Ferraz temían lo que ha ocurrido en algunos lugares, como el caso de Madrid, donde la suma de la izquierda no ha logrado la mayoría necesaria para formar gobierno porque Podemos “no ha conseguido mantenerse” y ha “pagado” sus líos internos.
Respecto a la posibilidad de que Sánchez intente algún tipo de acuerdo con Ciudadanos, fuentes de la Ejecutiva socialista bromearon con que lo hablará el presidente en funciones con Emmanuel Macron en la reunión de ambos esta tarde en París. Este viaje hace que Sánchez no esté presente en la reunión de la Ejecutiva Federal de esta tarde en la que se aprobará el comité negociador.
(SERVIMEDIA)
