La reunión entre el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, concluyó minutos antes del mediodía, por lo que no duró ni una hora.
El encuentro duró apenas 50 minutos, lejos de la hora y 40 minutos de la reunión entre Sánchez y el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, que se celebró ayer, lunes.
Rivera llegó al Palacio de La Moncloa para mantener su primera reunión con Sánchez desde que la moción de censura le hizo presidente del Gobierno, y tras unas elecciones en las que el líder socialista se encara a su reelección como jefe del Ejecutivo.
El líder de Cs llegó puntual a las 11.00 horas al edificio principal del complejo de La Moncloa. Sánchez lo esperaba en lo alto de la escalinata, ambos vestidos con traje oscuro, Rivera con corbata azul de topos rojos y Sánchez con corbata granate.
Con rostro serio, Rivera estrechó la mano del presidente, quien aguardaba su llegada con una sonrisa. «¿Qué tal, Albert?», le dijo justo antes de meterse los dos en el edificio. Ya dentro, mientras las cámaras grababan el tradicional mudo de la reunión, ambos charlaban sobre sus hijas.
Rivera había sido hasta ahora el único líder de los principales partidos que no había pisado La Moncloa desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno, es decir, desde junio de 2018.
El presidente en funciones empezó ayer con Casado una ronda con los líderes de los principales partidos que concluirá esta tarde con la reunión que mantendrá con el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.
CUATRO PACTOS DE ESTADO
Rivera planteó este martes a Sánchez cuatro pactos de Estado, dentro de la oposición “leal” que aseguró que va a mantener en esta legislatura.
En la rueda de prensa que ofreció en el edificio del portavoz del Gobierno, Rivera expuso las cuatro materias que le ha planteado a Sánchez, fuera de ideologías, por España y el “interés general”: educación, despoblación, inmigración y lucha contra el terrorismo.
Rivera trasladó que, en la reunión de 50 minutos con Sánchez, le ha pedido al presidente que «rectifique y reflexione» sobre el Pacto de Estado por la Educación que el PSOE “reventó” la legislatura pasada, para que no haya continuas “contrarreformas y parches” en esta cuestión.
Además, abogó por un pacto contra la despoblación, porque es “un problema vital para millones de españoles de esta España vaciada”.
El tercer pacto, sobre inmigración, debería centrarse a su juicio en dos aspectos: adoptar medidas para que la inmigración “regular” sea “ágil” y, por otro lado, combatir las mafias ilegales, dejando claro que “este no es el país para traficar con las personas”.
Por último, en lo referido a la “seguridad y lucha contra el terrorismo”, le planteó que cuente con Ciudadanos si hay que modificar leyes o endurecer aspectos de la lucha contra el terrorismo.
(SERVIMEDIA)