Twitter identifica 53 millones de cuentas falsas en lo que va de año

La red social Twitter ha identificado 53 millones de cuentas falsas entre enero y marzo de 2019, según revela el informe enviado por la compañía a la Comisión Europea en cumplimiento del código de prácticas contra la desinformación, en el que asegura que alrededor del 75% han sido eliminadas.

Son perfiles que se dedican a hacer ‘spam’ o que no están gestionados por ningún ser humano, sino que actúan como ‘bots’, según explica un documento de Twitter consultado por Servimedia. Son cuentas similares a las cerradas recientemente por la red social y vinculadas al candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Pablo Casado, según revela ‘eldiario.es’.

De todas las cuentas presumiblemente falsas o maliciosas detectadas por la red social, se cerraron más de 39,7 millones , según el documento enviado por Twitter a la Comisión Europea que, aunque agradece a la red social la información, le pide que en el próximo informe desagregue las cuentas que correspondan a países de la Unión Europea.

Estos informes los ha publicado Bruselas y proceden de los tres gigantes tecnológicos Facebook, Google y Twitter, que informan mensualmente al Ejecutivo comunitario en el marco de su estrategia para luchar contra la desinformación de cara a las elecciones al Parlamento Europeo del próximo mes de mayo.

Las tres plataformas suscribieron el Código de buenas prácticas contra la desinformación y se comprometieron a informar sobre sus acciones. Entre las medidas que las tres tecnológicas han incorporado está etiquetar la publicidad política que difunden.

Facebook y Twitter han hecho que sus bibliotecas de publicidad política sean de acceso público y la de Google está en fase de pruebas. Esto implica una publicidad política “más transparente para el público”, según la Comisión Europea.

Sin embargo, Bruselas considera necesario “realizar más mejoras técnicas y compartir la metodología y los conjuntos de datos relativos a las cuentas falsas para que los expertos, los verificadores de datos y los investigadores puedan llevar a cabo una evaluación independiente”.