Pederastia, aborto, homosexualidad o Franco: así fue la entrevista al Papa en ‘Salvados’

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Tras años de insistencia Jordi Évole logró entrevistar al Papa Francisco en su programa ‘Salvados’. Durante una hora de conversación Jorge Bergoglio comentó los temas más controvertidos y de máxima actualidad como la crisis de la inmigración y su rechazo a los muros; los casos de pederastia en la Iglesia, el aborto, la homosexualidad o la exhumación de Francisco Franco.

Refugiados

«¿En qué piensa el Papa cuando ve que 35.000 personas han perdido la vida tratando de cruzar el Mediterráneo?». Con esta pregunta Évole ponía sobre la mesa la tragedia de la inmigración y el Papa lamentaba que la vieja Europa haya olvidado que está hecha de migrantes. Sobre la construcción de muros, como el que persigue el presidente de Estados Unidos Donald Trump ante México, se mostraba contundente: «El que levanta un muro termina preso del muro que levantó», decía.

Tras enseñarle unas de las ‘cuchillas’ (concertinas) que están colocadas en la valla que separa la ciudad autónoma de Melilla con Marruecos, el Pontífice, con rostro de dolor, denunciaba «hasta dónde es capaz de descender la humanidad de una persona» y subrayaba: «Tal es la inconsciencia que parece lo más natural, nos hemos acostumbrado a esto. El mundo se olvidó de llorar, esto es lo más inhumano que hay».

Abusos sexuales en la Iglesia

El Papa Francisco también se refería a los abusos sexuales que se han producido en el seno de la Iglesia. El Pontífice subrayaba que cualquier víctima tiene que denunciar los hechos, tal y como se apuntó en la Cumbre de la pederastia llevada a cabo en el Vaticano, y admitía que comprende la decepción de algunos por el hecho de que siempre se haya intentado tapar todos los casos

«Si yo hubiera ahorcado 100 curas en la plaza dirían ¡Qué bien!», aseguraba.

Aborto

Preguntado sobre el aborto, en caso de violación, Francisco denunciaba que no es «justo eliminar una vida humana para resolver un problema». Sin embargo, tras subrayar que «no es lícito», ha puesto el acento en que  «la entendería a ella en su desesperación».

Homosexualidad

Sobre la homosexualidad, señalaba que «las tendencias no son pecado», y matizaba las polémicas palabras por las que fue muy criticado cuando señaló que en caso de niños gays se pueden hacer cosas con la psiquiatría. Tras justificar sus palabras, por no utilizar el idioma propio, se dirigía los padres: «Si ven cosas raras, consulten, vayan a un profesional». Eso sí, una vez que la tendencia esté confirmada, «ese hombre y esa mujer tienen derecho a una familia».

Feminismo

El Papa también admitía ante Jordi Évole que se equivocó cuando dijo que «el feminismo es el machismo con faldas», y ha señalaba que lo que tenía que haber dicho es que «todo feminismo puede correr el riesgo de transformarse en un machismo con faldas».

Franco

Preguntado sobre la decisión del Gobierno de España de exhumar a Franco, Jorge Bergoglio aseguraba que «no tiene opinión» y añadía que es un tema en el que no se ha metido aunque ha existido una comunicación con el Vaticano.

Eso sí, sobre la Ley de Memoria Histórica y el deseo de muchos de encontrar a sus muertos desaparecidos para darles sepultura, se mostraba contundente: «Una sociedad no puede sonreír al futuro teniendo sus muertos escondidos. Los muertos son para ser enterrados, pero no para ser escondidos. Nunca vas a tener paz con un muerto escondido».

Pobreza

El Pontífice se mostraba también muy crítico contra el capitalismo. Tras preguntarle el periodista de ‘La Sexta’ si es el sistema económico responsable de la pobreza, el Papa afirmaba que «en general sí», y añadía que «cada vez hay menos ricos con mucha plata y cada vez hay más pobres con muy poca plata». Advertía que con el capitalismo salvaje «Estamos en una tercera guerra mundial a pedacitos».

El Papa desvelaba que a las diez de la noche se va a la cama, que «duerme como un tronco» y que se despierta a las cuatro de la madrugada. Reconocía que suele echar la siesta por la tarde y que no tiene teléfono móvil

A la pregunta de si «¿es un sacrilegio decir que Messi es Dios?», el Papa respondía con humor. «En teoría sí», afirmaba.