Borrell se libra de comparecer de urgencia para explicar la posición del Gobierno

La Diputación Permanente del Congreso de los Diputados rechazará este lunes que el ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Josep Borrell, tenga que comparecer en una sesión extraordinaria de la comisión del ramo para exponer la posición del Gobierno ante la crisis de Venezuela, pese a que Ciudadanos y el PDECat apoyaron la petición del PP.

José Ramón García Hernández presentó la solicitud deseando que estemos ante el fin de la “dictadura” del “asesino” y “violador de derechos humanos” Nicolás Maduro, “usurpador y presidente ilegítimo”, al que no se le pueden dar ocho días.

Por eso, acusó al Gobierno de tener un “divorcio con la realidad” , con el PSOE, el Parlamento, las instituciones internacionales y los venezolanos, y le pidió que “no naden en la mediocridad moral y cambien de posición ya”. Según dijo, el PS ya no es Partido Socialista sino Pedro Sánchez. ¿Por qué le da oxígeno a Maduro?”, preguntó, pididendo “elecciones de verdad y no de juguete”, convocadas por Juan Guaidó y no por Maduro.

En nombre del PSOE, Patxi López recriminó al PP que promueva la comparecencia urgente de ministros para soltar mítines y ganar votos, en una “utilización perversa de las instituciones” que se extenderá a los ayuntamientos. Según denunció, ahora que está en la oposición “todo vale”, cuando mientras estaba en el Gobierno el PP no cortó relaciones con Venezuela.

Por el contrario, avaló la posición del Gobierno, suscrita por la UE, por lo que negó que haya un divorcio entre dicha posición y las instituciones europeas, y justificó el intento de mediación y plazo para convocar exteriores para evitar el peligro de una “escalada de violencia sin precedentes” y de que Venezuela se convierta en escenario de una lucha geopolítica de países externos.

Pablo Bustinduy, portavoz de Exteriores de Unidos Podemos, describió el de Guaidó como “crónica de un golpe anunciado” que preparó el Gobierno de EEUU y tachó de “inédito” el ultimátum de España, cuya posición ve “improvisada” e “irresponsable”, y recordó que se reconocen estados, no gobiernos, y puso de manifiesto que si Repsol tiene un problema la semana que viene, Sánchez llamará a Maduro y no a Guaidó, porque la oposición no controla el país, sino que éste está totalmente polarizado.

GUERRA CIVIL

En esa línea, Bustinduy advirtió de que reconocer a Guaidó es alentar un caos para permitir que EEUU y Brasil derroquen a Maduro por la vía militar y, eventualmente, una guerra civil. ¿Va a apoyar una intervención militar o uno de los bandos de una guerra civil?”, preguntó tanto al Gobierno como al PP y Ciudadanos, avisándoles de que, si toman esa decisión, les perseguirán sus consecuencias.

Melisa Rodríguez, de Ciudadanos, culpó a Nicolás Maduro de ningunear a la Asamblea Nacional venezolana presidida por Juan Guaidó, que sí fue elegida democráticamente y que a su juicio se acogió a un mecanismo legal para proclamarse presidente encargado.

Además, acusó al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero de haber dado aire al Gobierno de Nicolás Maduro y exigió a España que “un país hermano” acompañe la transición a la democracia y a Sánchez que ejerza el liderazgo que le corresponde en ese acompañamiento, por lo que aprobó la solicitud de comparecencia.

Jordi Salvador, de ERC, se negó a legitimar un golpe de Estado después de que la derecha no haya avalado elecciones válidas que han dado la victoria al chavismo. “Consideran que Venezuela es su colonia”, afeó, calificando de “fascismo” la actitud de no aceptar los resultados electorales que no les gustan; un adjetivo que Melisa Rodríguez exigió retirar. Fuentes de ERC anunciaron su voto en contra de la solicitud de comparecencia.

El portavoz del PNV, Aitor Esteban, reconoció que la situación en Venezuela es terrible, con un Gobierno “autoritario” y sin elecciones libres, que son las única salida a la situación actual, pero llamó a “coordinarse con la UE” y hacer las cosas con “resultados”. Dijo que sí cree que tiene que venir a comparecer Borrell, pero no ve “mucho sentido” a que lo haga de forma inmediata fuera del período ordinario de sesiones.

En el Grupo Mixto, el diputado del PDECAt, Jordi Xuclá, anunció a García Hernández el voto a favor de su grupo “a pesar de su intervención”. El portavoz de Compromís, Joan Baldoví, ironizó que el PP sólo tiene en su mapa Cataluña y Venezuela, criticó la “autoproclamación de un presidente que no ha elegido nadie” y pidió que el ultimátum de ocho días se dé también a países como Arabia Saudí o Libia, a cuyos mandatarios han avalado anteriores presidentes del PP o la propia Monarquía. Finalmente, Marian Beitialarrangoitia, de Bildu, anunció el voto en contra y criticó las “injerencias externas”.