La ministra de Exteriores y la vicealcaldesa de Madrid reciben el Año Judío

La ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, junto a la comunidad judía de España dieron este miércoles la bienvenida al Año Nuevo Judío, que se presenta «lleno de turbulencias» y en unos momentos «duros» para Madrid y para todo el país por la pandemia del Covid-19, según reconocieron ambas responsables políticas.

«Feliz año, es un año un poco complicado el que viene, lleno de turbulencias, de incertidumbre, desafíos, pero estoy segura de que vamos a enfrentarlo como los anteriores, con enormes dosis de determinación, muchísima ilusión y creciéndonos ante la adversidad, porque de eso sabe esta comunidad», subrayó este miércoles por la tarde González-Laya.

Así lo indicó en un acto organizado por Centro Sefarad-Israel y celebrado en el jardín de su sede de la calle Mayor, en Madrid, ante la llegada del año 5781 del calendario judío. La festividad, que se conoce como Rosh Hashaná, se celebra a partir de este viernes en todo el mundo.

La ministra aseguró que el año judío que termina ha sido «muy rico», con actos como el recuerdo «de una manera importante» del Holocausto en el «templo de la muerte» que es Auschwitz y que «define por qué hay que seguir trabajando por mantener esta memoria colectiva», o más recientemente, con un homenaje al diplomático Ángel Sanz Briz.

Durante la celebración, también intervino la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, quien lamentó que esta celebración haya tenido que producirse «en unos momentos tan duros para los madrileños» por la pandemia.

UNA CELEBRACIÓN MADRILEÑA

Villacís destacó que Rosh Hashaná «no solo es una celebración judía sino también madrileña» y ha invitado a trabajar para «parar el negacionismo y todo movimiento intolerante».

Asimismo, la consejera de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera, puso de manifiesto el «trabajo conjunto, desde 2006, con el Centro Sefarad-Israel apostando por el intercambio cultural y las alianzas culturales de civilizaciones».

Las comunidades judías estuvieron representadas en el acto por el presidente de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), Isaac Benzaquén, quien subrayó que «para la Federación, Centro Sefarad-Israel es un gran socio en la misión de difundir la cultura judía y tender puentes entre España e Israel» y agradeció al Gobierno la adhesión de España a la definición de antisemitismo de la IHRA.

El director del Centro Sefarad-Israel, Miguel de Lucas, afirmó que «a pesar de las circunstancias y aplicando las normas vigentes, Centro Sefarad-Israel no ha querido dejar de sumarse a la celebración del año judío».

Como cada año, durante esta celebración, Centro Sefarad-Israel ha otorgado su premio anual Corona de Esther, que en esta ocasión ha sido otorgado al expresidente del Parlamento Europeo, Enrique Barón, «por sus aportaciones en pos del entendimiento entre los países que conforman la Unión Europea y el reconocimiento de minorías sociales como las comunidades judías».

Durante su discurso, Enrique Barón dijo recibir este galardón «como un premio execuo» con su «añorada esposa Sofía Gandarias». Además quiso recordar que el Ministerio del que formó parte «editó la primera guía judía de España».

Precisamente, sobre el premiado, el presidente de la Comunidad Judía de Madrid, León Benelbas, aseguró durante su discurso que «es un amigo del pueblo judío como parte sustancial de la historia de Europa».