Aguado confía en la colaboración entre administraciones para seguir bajando la curva

El vicepresidente del Gobierno madrileño, Ignacio Aguado, confía en la colaboración entre administraciones para seguir bajando la curva y que la Navidad «no sea por Skype».

A su llegada a la catedral de la Almudena, donde se celebra la misa en honor de patrona de Madrid y ante la ausencia de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, en cuarenta por un caso de Covid en su entorno, Aguado ha puesto el acento en la colaboración interadministrativa, que «ya está dando frutos».

Ha puesto como ejemplo la combinación entre el estado de alarma decretado por el Estado y las zonas básicas de salud puestas en marcha por la Comunidad. Aguado ha destacado que en la Comunidad llevan trabajando más de un mes para acercarse a ese objetivo de 25 contagios por cada 100.000 personas.

«Ojalá que nos aproximemos lo máximo posible y que eso suponga que estas Navidades no sean por Skype», ha deseado el vicepresidente regional. «Ojalá que nos aproximemos lo máximo posible y que eso suponga que estas Navidades no sean por Skype, que podamos vernos con nuestros hermanos que vienen de fuera, con nuestros abuelos, tíos… (Es) el objetivo de bajar el número de personas en UCI, que es lo más importante, y que haya una cierta reactivación económica que permita que la gente no se quede en la ruina», ha insistido el también portavoz del Gobierno regional.

Ignacio Aguado ha remarcado que este día de la patrona de la capital es para recordar a los fallecidos y acordarse de los que siguen hospitalizados «para pedirle a la Virgen que esté con ellos, que les apoye, que les dé consuelo y al resto una razón más para seguir trabajando, bajando esa dichosa curva, para intentar que las cosas vayan bien, que se entre en invierno en las mejores condiciones posibles y que sea capaz de alguna manera de salvar esta campaña de Navidad».

«Que nos podamos ver con los nuestros, que comerciantes, autónomos y pymes puedan tener una campaña de Navidad digna y que el hecho de bajar la curva no nos haga bajar los brazos sino lo contrario, seguir con la guardia alta», ha sostenido Aguado.