PP y Ciudadanos cargan contra VOX por querer eliminar las ayudas contra la violencia de género

El secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, se mostró este jueves “seguro” de que en Andalucía se logrará un acuerdo para “conseguir el cambio” y desbancar al PSOE del poder, aunque rechazó que Vox esté haciendo de la violencia de género una “cuestión nuclear” de la negociación.

En una entrevista en RNE recogida por Servimedia, el ‘número dos’ de Pablo Casado en Génova hizo estas consideraciones después de que la formación de extrema derecha condicionase ayer su apoyo a PP y Ciudadanos a eliminar ayudas a organizaciones feministas y contra la violencia de género, al considerar que subvencionan a “podemitas radicales”.

“Lo cierto es que la violencia, la ejerza quien la ejerza y contra quien se ejerza, es algo que todos debemos combatir y las leyes deben estar ahí para proteger a los inocentes. No es de recibo que en el siglo XXI la gente vaya con miedo por la calle”, sentenció García Egea, convencido de que los políticos han de “emplearse a fondo” en esta cuestión.

En concreto, sobre Vox, consideró que “ningún diputado puede estar en contra de que se luche contra la violencia” y advirtió: “Quien haga de esto una cuestión nuclear a la hora de negociar el futuro Gobierno de Andalucía, se equivoca”. “Los políticos estamos para mejorar las leyes y aumentar la protección de los españoles inocentes”, apostilló.

El líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, aseguró este jueves que los dirigentes de Vox aún no saben «cómo funcionan las instituciones» y cómo se modifican las leyes, y por eso condicionan la formación de un Gobierno regional a la eliminación de ciertas medidas contra la violencia de género.

En una entrevista en Antena 3 recogida por Servimedia, Marín se refirió así a la exigencia de Vox, como contrapartida para apoyar el acuerdo entre el PP y Ciudadanos, de eliminar un punto de ese pacto relativo al impulso necesario para poner en marcha las medidas aprobadas por el Parlamento de Andalucía el pasado mes de julio.

Marín recordó que esas medidas fueron aprobadas por la unanimidad de la Cámara regional, en su compromiso de proteger a todas las víctimas de esa «lacra», que ni el Estado de Derecho, la Constitución, el Estatuto de autonomía ni las leyes «pueden permitir».

Una reforma legal, subrayó, no se puede hacer «por imposición de nadie» sino mediante un acuerdo parlamentario para el que hacen falta mayorías. «Tendrán que aterrizar y darse cuenta», dijo, de que un cambio en Andalucía después de casi cuarenta años de gestión del PSOE no puede depender solo de una modificación legislativa o de poner en marcha un decreto, sino que requiere medidas para los ocho millones y medio de andaluces, no solo para los votantes de un partido u otro.

Marín subrayó que son los 47 escaños que suman PP y Ciudadanos los que pueden «provocar el cambio» en Andalucía, no los 12 de Vox, y esos dos partidos han hecho «un trabajo muy serio» para llegar a un acuerdo basado en un programa de medidas.