Día de los Difuntos: Morirse sin seguro solo se lo pueden permitir los ricos

En España se cobran muy cara la frase que dijo Maximiliam Robespierre: «la muerte es el comienzo de la inmortalidad». Precisamente para acceder a la inmortalidad en ciertas provincias como Barcelona, un entierro conlleva a las arcas familiares 6.441 euros de media. Un desembolso que superaría más de 9 veces el salario mínimo interprofesional, es por esta circunstancia que cada vez se contratan más seguros de decesos con pago fraccionado

El seguro de decesos ha estado dominado en España con más del 60% de la cuota del mercado por 3 Aseguradoras formando prácticamente un oligopolio. «Es un seguro con una tradición muy arraigada y que en muchos de los casos ha sido perjudicial para el propio asegurado al no mirar otras compañías solventes y más económicas», asegura el CEO del comparador iDecesos.com, Carlos Romera.

El desarrollo de este producto ha sido espectacular, hasta convertirse en un multirriesgo familiar. Las compañías actualmente no solo se ciñen a cubrir el fallecimiento del asegurado, sino que añaden coberturas adicionales como asistencia en viajes, repatriación del fallecido en caso de accidente, limpieza bucal gratuita por asegurado, descuentos hospitalarios preferentes, borrado de huella digital del fallecido, testamento online y un largo etcétera. Según nos comenta Carlos Romera, todos estos servicios hacen que la demanda no deje de crecer y los clientes vean una usabilidad a lo largo de la vida de la póliza.

En el caso de España, el envejecimiento avanza de forma acelerada ya que en menos de treinta años las personas mayores de 65 se han duplicado, además de la baja tasa de natalidad que se registra desde hace algunas décadas. Según la Fundación General CSIC, las personas mayores de 65 años se sitúan alrededor del 17% de la población total, con un total de algo más de siete millones de persona, de las que un 25% se consideran octogenarias.

En el Día de todos los Santos, serán numerosas los familiares que se acerquen a los cementerios de todo el país para colocar flores y recuerdos a sus parientes fallecidos. E incluso esos actos al igual que los seguros de decesos conllevan desembolsos muy dispares, a efectos económicos, en función del lugar escogido para dar sepultura al familiar y de una serie de factores que condicionan el importe final.

El ataúd tiene un precio muy volátil dependiendo del modelo y las calidades que se exijan. Según el estudio de la Confederación de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECU), se pagan por él más de 750 euros de media.

Tipos y Modalidades de pago del seguro de decesos

Muchas personas tienen la errónea idea de que todo lo pagado durante años de prima en sus seguros de decesos, si cambian de Aseguradora pierden todo lo aportado, como si fuera un plan de pensiones y no es así. Esta idea y argumento comercial de las aseguradoras más longevas en este producto ha provocado un sobre coste para los clientes. Cada edad tiene una prima más interesante y siempre existe la opción de cambiar cuando vaya a dar el salto en precio.

Los tres tipos de primas que existen y que debes preguntar a tu asesor de seguros son:

– Prima Natural: interesa cuando eres joven pero va creciendo según la edad anualmente.

– Prima Mixta o seminatural: igual que la prima natural hasta los 65 años en muchos casos y a partir de ahí pasa a ser nivelada. El salto en prima es mucho más suave que la natural.

– Prima Nivelada: es una prima más controlada pero más cara.

Las modalidades de pago pueden ser 4:

– Modalidad Mensual: Sigue siendo la modalidad más extendida en España.

– Modalidad Trimestral: Es la modalidad que más crece por la comodidad.

– Modalidad Semestral: Se suele utilizar cuando los importes son muy bajos y no merece la pena fraccionarlos.

– Modalidad Anual: Para dos perfiles de clientes (Alto poder adquisitivo o Bajo importe de la prima de seguros)

– Modalidad Prima Única: Se paga el sepelio sólo una vez y lo contratan mayores de 65 años de alto poder adquisitivo o mayores de 80 años que no tienen otra posibilidad.

Pero ante todo, antes de contratar una póliza de seguro de decesos «debemos ver que producto cubre mis necesidades y que la compañía que contrate sea solvente porque es el único seguro que queremos que nunca se utilice, pero cuando se produzca el fallecimiento libere de todas las gestiones a los familiares y sólo se preocupen de velar el cuerpo», aconseja Romera.