El futuro de Gabi como técnico del Real Zaragoza empieza a tomar forma. Desde la dirección deportiva del conjunto aragonés tienen claro que el exjugador del Atlético de Madrid representa una apuesta firme y de largo recorrido para el banquillo maño. Su llegada al club ha supuesto un soplo de aire fresco y, pese a las dificultades del tramo final de la temporada, su trabajo ha convencido a los responsables del proyecto. Por ello, ya se han iniciado los primeros contactos para abordar una renovación que lo mantenga al frente más allá del 30 de junio de 2025.
Gabi ha demostrado carácter, compromiso y una rápida adaptación al entorno de La Romareda, factores que han sido claves para que el club considere su continuidad como prioritaria. Aunque su contrato todavía se extiende hasta el próximo verano, en los despachos se pretende atar cuanto antes al técnico para consolidar un proyecto estable. La dirección deportiva cree que Gabi puede ser el líder del resurgir definitivo del Real Zaragoza y el encargado de devolver al equipo a la élite del fútbol español.
La permanencia, condición indispensable para la renovación de Gabi
Pese al interés mutuo por seguir caminando juntos, desde el club reconocen que no se dará ningún paso oficial hasta certificar de manera matemática la permanencia en LaLiga Hypermotion. Con la salvación al alcance, la entidad prefiere actuar con prudencia antes de cerrar cualquier acuerdo. La planificación deportiva para la próxima campaña, clave para seducir a Gabi, también dependerá de la categoría en la que milite el equipo la temporada que viene.
Una vez garantizada la continuidad en Segunda División, se abrirá el proceso de diseño de la plantilla, en el que Gabi tendrá voz y voto. En este sentido, desde la dirección deportiva quieren demostrarle que se le considera una figura central del proyecto, no solo como entrenador, sino también como una pieza clave en la toma de decisiones. La idea es construir un equipo a su medida para competir con mayores garantías en la campaña 2025/26.
Un proyecto de futuro con sello de identidad
El estilo que Gabi está implantando en el Real Zaragoza, basado en el equilibrio defensivo y la intensidad, se ajusta a la identidad histórica del club. Su pasado como jugador de élite y su capacidad de liderazgo han conectado con la afición, que empieza a ver en él una figura capaz de recuperar la ambición perdida en los últimos años.
La continuidad de Gabi supondría dar estabilidad al banquillo zaragocista, una constante que ha faltado en las últimas temporadas. Desde el club confían en que, con un proyecto más sólido y continuidad en el cargo, el técnico pueda consolidar una plantilla competitiva que aspire, por fin, al ascenso a Primera División.