El Atlético de Madrid de Diego Simeone se aferra al orgullo en la recta final de LaLiga
A falta de apenas cinco jornadas para el cierre de LaLiga, el Atlético de Madrid ha dejado atrás cualquier esperanza de luchar por el título. Fuera de esa batalla, el equipo de Diego Simeone centra ahora todos sus esfuerzos en objetivos más realistas, aunque no por eso menos importantes. La clasificación a la próxima edición de la Liga de Campeones parece casi un hecho. Los rojiblancos ocupan la tercera posición con once puntos de ventaja sobre el quinto lugar. Una distancia cómoda, salvo una catástrofe deportiva que a estas alturas parece improbable.
Sin embargo, dentro del vestuario colchonero emerge un desafío más personal, uno que trasciende la tabla de posiciones, el Trofeo Zamora para Jan Oblak. El guardameta esloveno recuperó la sonrisa tras dejar su arco en cero ante el Rayo Vallecano, rompiendo una racha de seis partidos consecutivos recibiendo goles. Ese alivio defensivo reavivó la esperanza de alcanzar su sexto galardón, una hazaña que lo convertiría en el portero con más Zamoras en la historia de LaLiga.
La plantilla se conjura en torno a Oblak
El compromiso del grupo con su arquero es absoluto. Simeone no lo ocultó tras la victoria frente al Rayo. “Estamos con él, estamos trabajando como equipo para que él también tenga su premio, que será el premio del equipo de lo defensivo, de seguir sumándolo al trabajo que nos hace mejores”. Estas palabras reflejan el alma de este Atlético. El éxito individual nace del esfuerzo colectivo. Una filosofía que ha sido sello del Cholo desde su llegada, y que hoy vuelve a cobrar fuerza en el tramo final del campeonato.
Clément Lenglet, uno de los pilares de la zaga, lo resumió sin rodeos. “Todos como futbolistas tenemos retos y ese de Jan es importante. Nos viene bien a todo el equipo y cuanto menos encajemos mejor para todos. Si va bien para él, también para nosotros”. Ese respaldo se traduce en hechos sobre el campo. El equipo ha recuperado la solidez perdida en semanas anteriores y sabe que cada balón despejado, cada línea bien cerrada, cuenta en esta carrera contra Courtois, su principal competidor por el trofeo.
Simeone no afloja con un mismo once y una misma intensidad
Consciente de que la Champions ya está a tiro, Simeone no se permite el lujo de bajar la guardia. La victoria por 3-0 ante el Rayo fue más que un resultado. Fue una declaración de intenciones. Por eso, de cara al duelo contra el Alavés, el técnico argentino ha decidido repetir el mismo once, apostando por la continuidad y la intensidad. La defensa estará nuevamente compuesta por Le Normand y Lenglet como centrales, con Marcos Llorente y Javi Galán cubriendo las bandas.
En el medio, Rodrigo De Paul y Pablo Barrios serán los encargados de manejar los tiempos, mientras Giuliano Simeone y Gallagher aportarán amplitud por los costados. Arriba, Julián Álvarez y Sorloth volverán a formar la dupla ofensiva titular. En el banquillo, Griezmann seguirá esperando su oportunidad, mientras el equipo busca cerrar el curso con una imagen sólida y un mensaje claro y es que este Atlético, aunque no levante trofeos este año, no se rinde.