El jamón ibérico es uno de los grandes tesoros de la gastronomía nacional. Su sabor único y la tradición que lo rodea lo convierten en un imprescindible en las mesas navideñas de miles de hogares. Sin embargo, la Guardia Civil ha encendido las alarmas con un reciente comunicado que busca proteger a los consumidores de posibles fraudes. Este aviso, emitido a través de un vídeo informativo, ofrece una guía clara para identificar un jamón ibérico auténtico, garantizar su calidad y evitar engaños. En este artículo te contaremos cuáles son las recomendaciones de las autoridades para que no caigas en la trampa de los estafadores.
1Precintos y colores: la primera pista para identificar un jamón auténtico

La Guardia Civil ha emitido un comunicado destacando la importancia de los precintos en el jamón ibérico, elementos clave para garantizar su autenticidad. Estos distintivos de color permiten identificar la categoría del producto y proteger a los consumidores de posibles fraudes. Según la normativa, el color del precinto debe coincidir con la calidad especificada en la etiqueta, asegurando que el jamón cumple con los estándares establecidos.
La normativa clasifica los precintos en cuatro colores, cada uno asociado a un tipo de jamón ibérico. El negro representa la máxima calidad, correspondiente al jamón de bellota 100% ibérico. El rojo indica jamones de bellota ibéricos, pero no necesariamente de raza pura. El verde identifica jamones de cebo de campo ibéricos, criados en semilibertad, mientras que el blanco señala jamones de cebo ibéricos, producidos en granjas bajo condiciones controladas.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) ha subrayado la importancia de verificar que el color del precinto corresponda con la categoría indicada. Por ejemplo, un jamón de cebo no debería llevar un precinto negro o rojo. Este simple detalle es esencial para que los consumidores eviten engaños y aseguren que el producto adquirido sea auténtico y cumpla con los estándares de calidad establecidos.