Lando Norris ya es campeón. El piloto inglés cerró su primera corona mundial en Abu Dhabi y, además de entrar en los libros de historia, selló el año más lucrativo de su carrera. McLaren, pese a no figurar entre las escuderías con mayor músculo financiero del paddock, recompensó al británico con un paquete salarial que se disparó tras confirmar el campeonato.
El equipo de Woking mantiene sueldos más contenidos que los de Ferrari, Red Bull o Mercedes, y se rige por la norma habitual del 5/3/1 en materia de bonus: cinco millones por el título, tres por el subcampeonato y uno por terminar tercero. A esa prima se suman las recompensas por victoria y podio, cifradas habitualmente en torno a medio millón por triunfo.
Norris se embolsa un total de 30 millones de dólares por conseguir el Mundial
En el caso de Norris, el impacto del título ha sido inmediato. Su salario fijo, estimado en 20 millones de dólares, aumentó con cuatro millones derivados de sus victorias y otros cinco por el Mundial, lo que eleva su total a unos 30 millones de dólares solo en 2025. Un salto proporcional a su temporada, la más completa desde que llegó a la Fórmula 1.
Con ese volumen de ingresos, Norris se sitúa como el cuarto piloto mejor pagado de la parrilla, únicamente superado por Max Verstappen, Lewis Hamilton y Charles Leclerc. Los números, aun así, siguen lejos de los 65 millones del neerlandés o los 60 del británico de Ferrari, prueba de que McLaren continúa construyendo desde un modelo más controlado en gasto, aunque capaz de producir un campeón.

Oscar Piastri, por su parte, también sale reforzado. El australiano se embolsará un millón por su tercer puesto final, además de los bonus por victorias y podios que, en su caso, podrían elevar sus ganancias a unos 10 millones de dólares. Un balance que confirma no solo el crecimiento interno del equipo, sino la fortaleza del tándem Norris-Piastri en un año de regularidad, velocidad y presión resuelta.
Los patrocinadores, una pieza clave dentro de los contratos en Fórmula 1, también contemplan primas específicas por el título. Para McLaren, el impacto económico no será desproporcionado, puesto que el componente variable estaba asegurado y contemplado desde el inicio de la temporada. El campeonato no altera la estructura, pero sí refuerza la marca y la capacidad de atracción para 2026.
Los salarios de referencia en 2025
La fotografía económica del Mundial vuelve a confirmar el dominio de Verstappen en el plano financiero. El neerlandés sigue siendo el piloto mejor pagado de la parrilla, con 65 millones y contrato hasta 2028. Le sigue Hamilton, con 60 millones, y cerrando el podio salarial, Leclerc con 34. Fernando Alonso se mantiene en 20 millones, al mismo nivel que Norris en sueldo base, aunque el asturiano no contaba con el impulso extra del título.
Carlos Sainz, por su parte, figura en 10 millones tras su primer año en Williams, una cifra que podría crecer si la progresión del proyecto continúa. Gasly, Albon, Russell, Ocon y Hülkenberg completan el bloque intermedio, mientras que los debutantes y jóvenes talentos —como Antonelli, Bearman o los pilotos de Racing Bulls— siguen en cifras que oscilan entre el millón y los dos millones.
El cierre de temporada deja una doble constatación: McLaren ha fabricado un campeón mundial en pleno proceso de reconstrucción financiera y Norris ha pasado, en menos de un año, de promesa perpetua a referencia absoluta del campeonato. Con la copa en sus manos y el contrato reforzado, 2025 se convierte en el año que le abrió todas las puertas: la deportiva y la económica.






