Sin lugar a dudas, la posibilidad de volar es algo que siempre ha fascinado al ser humano, que ha podido encontrarse con esta situación en el mundo de la ficción, siendo Harry Potter y sus escobas uno de los grandes responsables de que muchos sueñen con la posibilidad de que sus escobas voladoras fuesen una realidad.
El avance tecnológico pone ahora precio al sueño de volar como el personaje creado por J.K. Rowling, y aunque puede llegar a hacer que se experimente una sensación un tanto similar, su precio no es apto para todo el mundo. El coste del prototipo que puede hacerlo posible cuesta 100 meses de salario mínimo en España.
¿ES POSIBLE BORRAR COMO HARRY POTTER?
Al mismo tiempo que conocemos el proyecto del Hyperloop español para unir Valencia y Madrid en solo 30 minutos, que sin lugar a dudas puede revolucionar el transporte, hay otros inventos que van un paso más allá, incluso tratando de llevarnos a volar como hace Harry Potter subido en una escoba en la ficción.
Harry Potter marcó a la generación nacida entre la década de los 90 y los principios de los 2000, cuando vivió un gran auge con el estreno de sus películas, los libros y los videojuegos basados en la historia del joven mago. Millones de niños que veían sus películas o leían sus libros soñaban con la posibilidad de volar en escoba.
Esto parecía algo propio de la ciencia ficción, pero la realidad es que estamos más cerca de que sea una realidad, aunque con ciertos matices tecnológicos. Aunque la lógica nos puede llevar a pensar que es algo imposible, la respuesta hoy en día es que sí se puede volar en una escoba, aunque un tanto particular.
Para poder montarse en una escoba voladora la clave está en los vehículos personales eVOTL (electric Vertical Take-Off and Landing), que no deja de ser un dron de gran tamaño para una persona.
UNA ESCOBA 'ESPECIAL' PARA VOLAR COMO HARRY POTTER
La clave de los mencionados vehículos eVOTL es que están basados en torno a tres ideas fundamentales, la primera de ellas que es eléctrico, funcionando con baterías. Además, posibilita el despegue y aterrizaje vertical, sin necesidad de pista, como hace un helicóptero; y además son personales, estando concebidos para ser usados por una o dos personas como máximo.
Al contar con varios rotores en forma de hélices pequeñas distribuidos alrededor de la estructura, este tipo de vehículos tienen la capacidad de girar y crear fuerza para elevarse, como si nos subiésemos a la escoba voladora de Harry Potter cuando este jugaba al Quidditch.
Este vehículo especial cuenta con un ordenador de a bordo para repartir potencia y corregir equilibrio, así como un sistema que le permite avanzar y cambiar la velocidad si es necesario.
LA ESCOBA DE HARRY POTTER, SIMILAR A UN HELICÓPTERO
Más allá de conocer Arc, la nave que puede redefinir el transporte mundial, hay algunos proyectos innovadores en marcha, y los eVOTL pueden ser el futuro. A diferencia de lo que sucede con los helicópteros que todos tenemos en la mente, en este caso se usarían muchas hélices pequeñas en vez de una arriba y un rotor de cola.
Gracias a ello tiene una mayor simpleza mecánica y es más sencillo de estabilizar con electrónica. Los expertos destacan que podría despegar en espacios pequeños y serían sencillos de pilotar, en dos aspectos que se parecen mucho a las escobas voladoras de Harry Potter en la ficción.
No obstante, a diferencia de lo que sucede en el mundo cinematográfico que se basa en los libros del joven mago de J.K. Rowling, son equipos que tienen una baja autonomía y un nivel muy alto de ruido, pues el gran número de hélices que incorporan hace que sean más ruidosos.
A ello se debe sumar el hecho de que, al tener dependencia de la batería, en el mejor de los casos podrían disfrutarse de vuelos cortos de entre 10 y 30 minutos, un aspecto al que también hay que añadir la seguridad y los permisos que serían necesarios para operar estos equipos.
Hablando de ejemplos concretos, nos encontramos con el proyecto del Jetson One, un monoplaza eléctrico dotado de ocho rotores que garantiza 20 minutos de vuelo y que puede llegar a alcanzar los 102 kilómetros por hora, además de tener un techo operativo de 1.500 pies.
Este es el ejemplo comercial que más se acerca a la escoba voladora de Harry Potter, aunque en una versión mucho más moderna. Sin embargo, su coste es de 120.000 euros, lo que lo aleja del bolsillo de gran parte de la población.
EL COSTE REAL DE UNA ESCOBA VOLADORA COMO LA DE HARRY POTTER
Si nos referimos a un prototipo casero que tenga una estructura compuesta que pueda asemejarse a la escoba voladora de Harry Potter, junto a uin paquete de baterías de ion-litio, compatibilidad con 6-8 motores, paracaídas balístico, etcétera, el presupuesto alcanzaría los 150.000 euros. Esto contemplaría solo las estructuras y ensayos, lo que supondría tener que hacer un desembolso de más de cien meses de salario mínimo en España.
A estos gastos habría que sumar la certificación del modelo, la regularización del mismo y la implementación de otros elementos que podrían llegar a aumentar el coste final. Al ser un dispositivo pensado para volar, no solo tiene que tener cargadores de batería de alta potencia para operar de manera fluida. También se deberían incluir las revisiones de motores y rotores, los recambios de baterías y las comprobaciones previas a cada vuelo.
Todo ello llevaría a tener que agregar miles de euros incluso con pocas horas de operativa. También sería necesario incluir un sistema de aterrizaje automático, así como la detección de fallos y la implementación de medidas de seguridad para reducir los riesgos.
A pesar de que haya quién sueñe con volar como Harry Potter, la realidad es que ningún vehículo eVOTL que se parezca a una escoba voladora pueda superar los 20 minutos de vuelo, al menos a día de hoy. Veremos, por lo tanto, si en el futuro las escobas voladoras pueden ser una realidad.
