Conducir para una plataforma VTC en España se ha convertido en una opción laboral cada vez más frecuente en las grandes ciudades, (sobre todo para la población inmigrante) donde la demanda de servicios como Cabify, Uber o Bolt no deja de crecer. Sin embargo, más allá de la expansión de estas compañías, la realidad de los conductores muestra un patrón común; largas jornadas, sueldos ajustados y unas condiciones que generan debate en comparación con el sector del taxi.
El atractivo inicial de estabilidad y contrato indefinido se enfrenta, en muchos casos, a la presión de cumplir objetivos y a la obligación de trabajar más de 12 horas para alcanzar un salario digno, en caso contrario, el sueldo ya no es lo que se espera. En este contexto, los datos de 2025 reflejan que los ingresos medios de un conductor de Cabify en España no difieren demasiado de los de Uber o Bolt.
Los sueldos brutos suelen oscilar entre los 1.300 y los 1.600 euros mensuales, con ligeras variaciones según la ciudad, los incentivos y las propinas. Madrid y Barcelona concentran las mejores oportunidades, (después de todo son las ciudades más grandes y con mayor demanda) aunque la diferencia no resulta determinante. Así, pese a las campañas publicitarias que cada empresa impulsa para destacar sus ventajas, lo cierto es que el bolsillo de los conductores apenas nota distinciones entre unas y otras plataformas.
El sueldo medio de un conductor de Cabify en España en 2025

Los conductores de Cabify en España perciben un salario que, en la mayoría de los casos, se mueve entre los 18.000 y los 20.000 euros brutos al año. Esto se traduce en una media mensual que ronda entre los 1.300 y los 1.600 euros, una cifra que puede variar en función de la ciudad en la que se trabaje y de factores como las horas extra, las propinas o las bonificaciones por rendimiento, vamos que se trata de una cifra que puede variar diariamente, dependiendo de todos los factores mencionados anteriormente.
Madrid y Barcelona son los escenarios más rentables, ya que concentran la mayor demanda de usuarios y ofrecen más oportunidades para aumentar los ingresos. No obstante, alcanzar la parte alta de esta franja salarial no es sencillo. Muchos conductores reconocen que deben asumir jornadas largas (en ocasiones superiores a las 12 horas) para llegar a esas cifras.
Aunque Cabify ofrece contratos estables en comparación con el taxi, la realidad es que el esfuerzo físico y mental que implica cumplir los objetivos impuestos por las flotas puede condicionar el balance final del trabajo.
Diferencias y similitudes con Uber y Bolt

La comparación con otras plataformas VTC muestra que las condiciones entre Cabify, Uber y Bolt son muy similares. De hecho, el sueldo medio de un conductor de Uber en España se sitúa en torno a los 1.470 euros mensuales, mientras que en Bolt las cifras pueden llegar a los 1.600 o incluso 1.800 euros en casos puntuales, ambas plataformas ofrecen sueldos más completos a sus conductores, en comparación con cabify.
La clave suele estar en las bonificaciones que cada empresa establece y en la flexibilidad de horarios, aunque en la práctica las diferencias apenas resultan significativas para el bolsillo de los trabajadores. Lo que sí se mantiene constante es la exigencia de cumplir con un volumen de facturación mensual.
En Uber, por ejemplo, algunos conductores aseguran que la empresa les marca como objetivo alcanzar los 4.000 euros facturados al mes, con la promesa de quedarse con un porcentaje superior a partir de esa cifra, la pregunta sería entonces, ¿se logró alcanzar esta meta diaria?. En Cabify y Bolt, los incentivos funcionan de forma parecida, lo que genera un sistema en el que los ingresos dependen tanto de la demanda como de la capacidad del conductor para soportar largas jornadas.
El taxi frente a las VTC: una brecha salarial cada vez más evidente

Mientras los conductores de Cabify, Uber y Bolt pelean por llegar a fin de mes con sueldos que rara vez superan los 1.600 euros, los taxistas continúan defendiendo una posición diferenciada. Un profesional del taxi puede facturar entre 3.500 y 4.500 euros mensuales, aunque de esa cantidad debe descontar gastos elevados como combustible, seguros, licencias y mantenimiento del vehículo y si son autónomos, pues debe calcular algunos montos adicionales.
Aun así, muchos terminan con un salario neto cercano a los 2.000 euros, cifra que deja en evidencia la brecha con las VTC. Este contraste ha sido uno de los motores principales de la tensión entre ambos sectores. Los taxistas denuncian la precariedad de las condiciones en las VTC y critican la falta de regulación específica, mientras que los conductores de plataformas reclaman que sus contratos indefinidos no siempre compensan las exigencias de horas trabajadas. Y es que al final, a pesar de las condiciones favorables que se han alcanzado, las compañías siguen necesitando personal, pero obviamente nunca será lo mismo un personal.
Con la llegada de nuevas compañías como Bolt y la presión de las asociaciones de taxistas, el debate sobre la sostenibilidad laboral de estos modelos se mantiene más vivo que nunca en España.