Una de las grandes preocupaciones de millones de personas en todo el mundo es empezar a ver cómo su cuerpo comienza a dar muestras de envejecimiento, unos signos que se hacen más evidentes a través del rostro. A pesar de que existen infinidad de tratamientos para prevenirlo o evitarlo, es inevitable.
Sin embargo, más allá de conocer cómo puede afectar el paso del tiempo a nuestra apariencia física, ahora un estudio ha revelado que el envejecimiento podría ser contagioso, tras comprobar una evidencia que se ha observado tanto en un ensayo clínico con ratones como con personas humanas.
8UN AVANCE PARA LOS TRATAMIENTOS ANTIENVEJECIMIENTO

Aunque puede que no tengamos mucho que hacer frente al paso del tiempo, esta investigación ha demostrado que conocer que envejecer es contagioso, lo que jugará un papel clave para los tratamientos antienvejecimiento del futuro, pero no es lo único. También ofrece una nueva perspectiva de cómo el envejecimiento puede trasladarse por el cuerpo, pasando de una célula a otra para absorber su energía vital.
Se trata de un trabajo inicial, pero no por ello hay que restarle importancia, ya que ofrece una visión muy destacada de los mecanismos que nos harán a todos sucumbir al propio paso del tiempo. Se trata de un hallazgo que puede marcar un antes y un después en la comunidad científica, tratando así de buscar soluciones que puedan ayudar a mitigar los efectos que todos sufrimos por el simple paso del tiempo.