Aun en el siglo XXI, uno de los grandes desafíos de salud pública son las enfermedades óseas. Con el paso del tiempo, afecciones como la osteoporosis comienzan a cobrar protagonismo, especialmente entre las mujeres postmenopáusicas y los adultos mayores. De hecho, organismos internacionales han revelado que al menos un 30% de la población mayor de 50 años está en riesgo de sufrir fracturas por debilidad ósea.
Aunque muchas veces se asocia el calcio solo a la leche, lo cierto es que existen muchísimos alimentos capaces de aportar este mineral esencial para mantener huesos y dientes fuertes. En este artículo, te contaremos todo lo que necesitas saber para cuidar tu salud ósea desde la alimentación, con opciones para todos los gustos, necesidades y estilos de vida.
4Las consecuencias de una dieta baja en calcio

Una alimentación pobre en calcio puede tener efectos serios a mediano y largo plazo. La más conocida de las enfermedades relacionadas es la osteoporosis, una patología que debilita los huesos y los hace propensos a fracturas, especialmente en la cadera, muñeca y columna vertebral.
Antes de llegar a ese punto, muchas personas atraviesan por una etapa conocida como osteopenia, donde la densidad ósea ya empieza a disminuir pero aún no alcanza niveles críticos. Detectarla a tiempo puede evitar complicaciones futuras.
En niños, la deficiencia de calcio puede desencadenar raquitismo, una enfermedad que provoca deformidades óseas, debilidad muscular y retraso en el crecimiento. También pueden presentarse problemas dentales como la desmineralización del esmalte, caries frecuentes y mayor susceptibilidad a fracturas dentarias.