Identificar si estás en una relación con un narcisista no siempre es fácil. Este trastorno no se limita a comportamientos extremos como han sabido decirnos, sino que en muchas ocasiones se manifiesta en detalles cotidianos que pueden erosionar una relación con el tiempo. Algunas señales podrían indicar si tu compañero o compañera se centra exclusivamente en sí mismo, dificultando una relación sana y equilibrada.
El narcisismo en la pareja no siempre es visible a simple vista, pero vivir una relación donde predominan estas señales puede generar un desgaste emocional profundo. Conocerlas es un primer paso. Actuar y decidir lo que es mejor para tu salud emocional es lo siguiente.
6¿Qué dicen los expertos sobre las señales de una relación con un narcisista?

Cuando la relación perfecta es solo una trampa: la psicóloga Deborah Murcia advierte sobre las señales tempranas del abuso narcisista. Las relaciones con personas narcisistas suelen comenzar con una intensidad engañosa. Según la psicóloga Deborah Murcia, muchas víctimas creen que están viviendo el mejor momento de su vida cuando, en realidad, están entrando en una relación de maltrato emocional. En el pódcast ‘En la mente de…‘, citado por La Vanguardia, Murcia explica que el narcisista «te conquista para sentirse poderoso, pero luego se empeña en apagar tu luz». Este tipo de relaciones se basa en un ciclo de manipulación que incluye fases de idealización, devaluación y descarte.
Una de las tácticas más frecuentes es el ‘gaslighting’, una forma de manipulación emocional que busca hacer dudar a la víctima de su propia percepción, ¿lo peor? Actualmente, es más habitual de lo que quisiéramos. El narcisista se presenta como encantador, pero poco a poco comienza a desestabilizar emocionalmente a su pareja, creando dependencia y confusión. Según Murcia, estas personas no soportan que su pareja brille con luz propia: «No permiten que la otra persona destaque, porque eso amenaza su necesidad de control».
La psicóloga Claudia Nicolasa, también en el pódcast ‘En la mente de…’ citado por La Vanguardia, describe a las víctimas del abuso narcisista como «ONGs andantes»: personas con una empatía muy desarrollada, que suelen provenir de historias personales marcadas por el abandono, la humillación o el rechazo. Esta combinación de sensibilidad emocional y necesidad de aprobación externa las convierte en blanco perfecto para los narcisistas.
Estas víctimas, al encontrar a alguien grandilocuente, seductor y aparentemente seguro, tienden a idealizarlo. Nicolasa advierte que esta atracción inicial puede ser peligrosa si no se detectan a tiempo las señales de manipulación.