En tiempos de incertidumbre económica, donde muchas personas mayores de 50 años sienten que el mercado laboral les ha dado la espalda, una buena noticia llega desde el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). El organismo ha puesto en marcha un subsidio que podría marcar una diferencia real para quienes están en una etapa complicada: 480 euros mensuales para quienes tienen más de 52 años y aún no han accedido a una pensión.
Esta ayuda del SEPE es una prestación no contributiva, pero con un detalle que la hace única: cotiza para la jubilación. Además de que no tiene un límite de duración mientras se cumplan los requisitos, busca brindar estabilidad y tranquilidad a quienes han trabajado toda su vida y hoy se encuentran en situación de desempleo.
2¿Quiénes pueden acceder a esta prestación del SEPE?

El SEPE ha establecido una serie de condiciones claras para acceder a este subsidio. La primera, por supuesto, es tener 52 años cumplidos al momento de realizar la solicitud. A esto se suma haber agotado la prestación contributiva por desempleo o encontrarse en situación legal de desempleo y haber cotizado al menos 90 días desde el 1 de noviembre de 2024.
Otra de las claves es contar con al menos 15 años cotizados a la Seguridad Social, de los cuales 2 deben haber sido en los últimos 15 años. Además, es necesario haber cotizado un mínimo de seis años específicamente por desempleo. Este detalle es importante, ya que hay personas que han trabajado como autónomos o en otros regímenes sin este tipo de cotización y, por tanto, no podrían acceder al subsidio.
También hay un límite económico: no superar el 75% del Salario Mínimo Interprofesional en ingresos mensuales. Esto equivale, en 2025, a 850,50 euros. Es decir, si la persona tiene ingresos superiores a esa cifra, no podría acceder al beneficio.
Por último, es imprescindible estar inscrito como demandante de empleo y mantener esa situación activa. No basta con anotarse una vez. Es necesario renovar la demanda y no rechazar ofertas laborales adecuadas o negarse a participar en actividades formativas o de inserción. El SEPE evalúa el compromiso del beneficiario con su reinserción laboral, incluso cuando el mercado no esté ofreciendo muchas oportunidades.