El verano es más que días de vacaciones en la playa. Muchas localidades de Europa se están viendo exponencialmente afectadas por la temperatura abrasadora que se ha posicionado en varios países europeos, incluida España. Una combinación abrumadora de calor extremo, sequía y ráfagas de viento ha provocado problemas de emergencia de gran magnitud en distintas zonas de España y Francia, siendo Cataluña uno de los focos más alarmantes.
La situación, que se ha venido presentado desde comienzos de semana, ha obligado a cientos de habitantes a mantenerse en aislamiento en distintos municipios, mientras los equipos de emergencia continúan luchando por frenar la evolución de la situación. La emergencia ha generado confinamientos obligatorios, cierre total o parcial de vías de transporte y un despliegue inédito de bomberos ante un escenario que se sigue complicando, según información recogida por New York Time, El País, y otros medios.
1Cataluña bajo llamas y en confinamiento obligado

Desde el lunes, el fuego avanza incesantemente por diversas zonas de Cataluña, donde las llamas ya han arrasado más de 3.000 hectáreas. Dada la situación de emergencia, la Generalitat ha emitido órdenes obligatorias de confinamiento para varios pueblos y barrios de la región, instando a los ciudadanos a mantenerse resguardados en sus casas o áreas seguras debido a la presencia de humo tóxico y la proximidad del fuego. Las autoridades catalanas han confirmado que las ráfagas de viento han alcanzado hasta los 88 km/h y están complicando el control del incendio.
David Borrell, que es inspector de incendios de la región, explicó el día de ayer que los equipos están trabajando «en condiciones muy precarias y muy duras». Informó, además, que las llamadas de emergencia de residentes preocupados por la situación se incrementaron durante la noche del lunes, lo que obligó a reforzar los equipos en la zona de Cataluña. Hasta el día de ayer, 89 dotaciones de bomberos estaban desplegadas para intentar controlar el fuego y evitar que las llamas alcancen áreas más densamente pobladas.
La Consejera de Interior y Seguridad Pública de Cataluña, Núria Parlon, habría explicado que el confinamiento por las restricciones a la movilidad debido al incendio de Paüls, Tarragona, se extendería durante unas horas más «para garantizar la seguridad de las personas y favorecer la movilidad de los operativos. Es importante hacer caso de las órdenes», explicó.
Francesc Boya, jefe de intervención del incendio de Paüls, por su parte, elogió el trabajo exhaustivo que están haciendo los Bomberos de la Generalitat. «En Cataluña hay habitualmente 350 bomberos en cada guardia y en este incendio han trabajado hoy 420 personas», informó, para, de esta forma, explica el esfuerzo que los efectivos han hecho para lograr una cierta contención de un fuego que ya ha consumido 3.137 hectáreas.
La decisión de mantener a los habitantes en confinamiento en algunas zonas de Cataluña, busca minimizar riesgos por la inhalación de humo denso, de igual forma, esta medida le permite a los bomberos maniobrar sin obstáculos. Este escenario, aunque parece poco usual, es parte de los protocolos de actuación frente a incendios cercanos a espacios habitados, especialmente cuando las ráfagas de viento impiden asegurar rutas de evacuación seguras.