Dean Huijsen abandonó el campo del MetLife Stadium con el rostro serio, consciente de que su expulsión dejó un sabor amargo en el cierre del partido ante el Borussia Dortmund. A pocos metros del césped, Xabi Alonso lo interceptó con serenidad. No hubo gritos, pero sí un mensaje firme.
Le recordó que ya había hablado de este tipo de situaciones. No era necesario correr ese riesgo, menos aún con el partido controlado. La charla fue breve, pero clara. Los errores, por pequeños que parezcan, pueden tener consecuencias mayores en el camino del equipo.
3Una adaptación que sorprendió a todos

Desde que llegó al club, el defensor neerlandés-español sorprendió por su seguridad y temple. A sus 20 años, nacido en Ámsterdam y criado en Málaga, entendió lo que significa jugar en el Real Madrid.
Su fichaje procedente del Bournemouth, por 58 millones de euros, fue criticado en su momento, pero sus actuaciones comenzaron a despejar las dudas. Lo sucedido en Nueva Jersey es solo un tropiezo en un camino que hasta ahora venía siendo muy positivo.