La serie diaria de RTVE, ‘La Promesa’, ambientada a comienzos del siglo XX, no escatima a la hora de generar momentos emotivos y giros drásticos que atrapan a la audiencia. Esta semana, los espectadores seremos testigos de uno de los eventos más esperados y simbólicos, la boda más inesperada. Lo que comienza como una despedida del mayordomo más querido y antiguo de la finca, se transforma en una celebración inesperada y valiente que desafiará las normas y pondrá a prueba lealtades dentro de la casa.
Mientras la finca se prepara para vivir una semana más llena de tensiones de poder y luchas personales, esta celebración representará un respiro, un homenaje a los personajes que han sostenido con coherencia y humanidad el día a día de ‘La Promesa’.
Más allá del vestido, las flores o la música, lo que quedará en la memoria de todos los promisers es la decisión de Rómulo y Emilia, ¿aceptarán casarse bajo qué términos, con qué asistentes, y en qué lugar? Una historia que, aunque secundaria, podría terminar robándose el protagonismo.
3El clima en ‘La Promesa’ no da tregua

Mientras se afinan los detalles para la boda de Rómulo y Emilia, otras tramas siguen desarrollándose en paralelo. Manuel seguirá afectado por el asedio de varias señoritas durante la reciente celebración de Adriano. Su rechazo a una nueva presencia amorosa muestra que aún no logra recuperar el equilibrio emocional que se alteró tras la muerte de Jana. Ángela, por su parte, recibirá una carta del hombre al que golpeó. Lejos de intimidarla, el mensaje abrirá una nueva línea de tensión con Lorenzo, continúa manejando sus acciones desde las sombras.
También hay tensión sobre la figura de Adriano, cuyo título de conde de Campos y Luján sigue siendo cuestionado por Leocadia. Ella intentará convencer a Catalina de que su comportamiento durante la fiesta demostró que no está a la altura. La mujer no solo quiere frenar el avance de Adriano, sino controlar completamente el rumbo de ‘La Promesa’.
En este contexto de conflictos y manipulación, Leocadia propondrá a Alonso un nombre para sustituir a Rómulo y no es precisamente Ricardo. El nuevo encargado sería más bien un aliado de la mujer de nombre Cristóbal Ballesteros. Un personaje misterioso que llega rodeado de incertidumbre.