Envejecer es un proceso natural, inevitable y profundamente humano. Sin embargo, lo que comemos puede marcar la diferencia entre un envejecimiento acelerado o uno más saludable, vital y pleno. Y aunque solemos asociar la longevidad con alimentos verdes, orgánicos y hasta aburridos, un reciente estudio ha puesto sobre la mesa un candidato tan inesperado como sabroso: el jamón curado.
Sí, como lo lees. Un alimento tradicional, profundamente arraigado en la gastronomía nacional, está ganando protagonismo en los laboratorios por algo más que su sabor. Y lo que han descubierto los investigadores podría cambiar, o al menos matizar, todo lo que creíamos saber sobre envejecer comiendo rico.
2Vivir más y envejecer mejor, ¿de la mano del jamón?

Cuando los investigadores alimentaron a estos pequeños gusanos con los péptidos extraídos del jamón curado, observaron un efecto notable: los ejemplares no solo vivieron más tiempo, sino que mostraron mayor resistencia al estrés oxidativo, uno de los grandes villanos del envejecimiento celular.
El estrés oxidativo se produce cuando existe un desequilibrio entre los radicales libres y los antioxidantes del organismo. Estos radicales, al acumularse, dañan el ADN, las proteínas y las membranas celulares, acelerando el deterioro propio de la edad. Aquí es donde este alimento entra en escena con un protagonismo inesperado.
Los péptidos presentes en el jamón curado actuaron como pequeños escudos moleculares, reduciendo el impacto de este estrés. Esto sugiere que no estamos solo ante un alimento sabroso, sino ante un posible aliado para mejorar nuestra calidad de vida a largo plazo. Aunque los estudios están en fase preclínica y no se han probado en humanos, los resultados son suficientemente sólidos como para que la ciencia empiece a mirar a este alimento desde otra perspectiva.