Especial 20 Aniversario

Lo que la OMS llama la nueva ‘epidemia silenciosa’ que te deja sin energía; y te está pasando

-

La sociedad moderna se enfrenta a un enemigo invisible que consume lentamente nuestra vitalidad día tras día, dejándonos sin energía . La OMS ha puesto el foco recientemente en lo que denomina una «epidemia silenciosa», un fenómeno que afecta a millones de personas en todo el mundo y que se caracteriza por una constante sensación de cansancio y falta de energía. Esta combinación de estrés crónico, privación de sueño y comportamientos sedentarios está minando nuestra salud de formas que apenas comenzamos a comprender.

Publicidad

Los expertos sanitarios llevan años advirtiendo sobre esta preocupante tendencia, pero es ahora cuando la magnitud del problema ha alcanzado niveles que justifican su clasificación como epidemia. El ritmo frenético de vida, las exigencias laborales cada vez mayores y la hiperconectividad digital han creado el caldo de cultivo perfecto para que esta condición se extienda silenciosamente, afectando a personas de todas las edades y estratos sociales sin distinción. La OMS subraya que estamos ante una crisis de salud pública que requiere atención inmediata, especialmente porque sus efectos negativos se acumulan gradualmente, haciendo que muchos no sean conscientes del peligro hasta que es demasiado tarde.

5
LAS SEÑALES IGNORADAS QUE LA OMS PIDE RECONOCER ANTES DE QUE SEA TARDE

Fuente: Freepik

Detectar esta epidemia silenciosa en uno mismo no siempre resulta sencillo, ya que tendemos a normalizar el cansancio crónico. La OMS ha elaborado una lista de indicadores que deberían encender nuestras alarmas: despertarse sin sensación de recuperación a pesar de haber dormido suficientes horas, experimentar bajones de energía pronunciados a media tarde, o notar que actividades que antes resultaban rutinarias ahora suponen un esfuerzo considerable, son señales claras de que podríamos estar sufriendo este síndrome de agotamiento que tanto preocupa a los expertos sanitarios.

Los especialistas consultados por la OMS insisten en que reconocer el problema es el primer paso para solucionarlo. Cuando estas señales aparecen de forma sostenida durante más de dos semanas, no deberían ignorarse ni atribuirse simplemente a «rachas malas«. La OMS recomienda acudir a profesionales sanitarios ante estos síntomas persistentes, ya que podrían ser manifestaciones de problemas subyacentes que requieren atención médica específica. Además, resulta fundamental comprender que esta epidemia silenciosa no solo afecta nuestro bienestar físico, sino que impacta directamente en nuestra salud mental, relaciones personales y rendimiento laboral, creando un efecto dominó que deteriora progresivamente nuestra calidad de vida en todos sus aspectos.

Siguiente
Publicidad