Cuando se trata de seguridad al volante, no hay margen para el error. Por eso, la Dirección General de Tráfico (DGT) insiste año tras año en un mensaje claro y directo: si bebes, no conduzcas. Más allá de las campañas institucionales y los eslóganes bienintencionados, hay una realidad que conviene conocer en detalle: ¿cuántas cervezas bastan para dar positivo en un control de alcoholemia?
En este artículo abordaremos lo que la DGT ha confirmado recientemente: las cantidades concretas, los factores que influyen y las consecuencias reales de sobrepasar los límites legales. Porque lo que está en juego no es solo el importe de una multa, sino tu vida y la de los demás.
3¿Qué consecuencias tiene dar positivo en un control de la DGT?
Una multa por alcoholemia no es simplemente una sanción económica. A menudo viene acompañada de la retirada de puntos del carnet, la inmovilización del vehículo y, en los casos más graves, la apertura de un procedimiento penal. Estos son los rangos de sanción establecidos por la DGT:
- Entre 0,26 mg/L y 0,50 mg/L: 500 euros y retirada de 4 puntos del carnet.
- Superior a 0,50 mg/L hasta 0,60 mg/L: 1.000 euros y 6 puntos.
- Más de 0,60 mg/L: delito penal. Puede suponer entre tres y seis meses de prisión, multas económicas de hasta 12 meses, trabajos en beneficio de la comunidad y retirada del permiso de conducir entre uno y cuatro años.
Además, si causas un accidente bajo los efectos del alcohol, las consecuencias legales y económicas se disparan. Incluso si cuentas con seguro, es probable que la compañía no cubra los daños ocasionados si se demuestra tu responsabilidad bajo los efectos del alcohol.