Carlos Sainz ya mete miedo con su Williams. Esta frase, que en su momento sonaba casi irreal, hoy cobra todo el sentido del mundo tras su brillante clasificación en el Gran Premio de Miami.
El piloto español logró un impresionante sexto lugar en la parrilla, superando a coches que en teoría son más rápidos.
Con este resultado, Williams vuelve a ser protagonista en el paddock, y el rendimiento de Sainz ya no es solo una sorpresa, sino una auténtica amenaza para sus competidores.
1La pole de Verstappen no eclipsa el protagonismo de Sainz
Max Verstappen volvió a deslumbrar con una vuelta impecable que le permitió hacerse con la pole position en Miami.
El piloto neerlandés demostró, una vez más, su capacidad al dejar atrás a los McLaren, Mercedes y al resto de favoritos, consolidando su dominio a pesar de no contar con el mejor monoplaza del campeonato.
Sin embargo, más allá de su talento, el verdadero foco de atención en este fin de semana se centró también en los Williams, con Sainz al frente, que demostró ser una seria amenaza.