El Deportivo Alavés vivió una noche amarga en Mendizorroza tras caer 0-2 ante el Rayo Vallecano. Pero si hubo un momento que marcó la diferencia, ese fue el penalti fallado por Joan Jordán.
El centrocampista decidió ejecutar la pena máxima a lo Panenka, un gesto que terminó en las manos de Augusto Batalla y que encendió la indignación del técnico Eduardo Coudet.
7Un Alavés en la cuerda floja
Con esta derrota, el Alavés se queda con 27 puntos, los mismos que el Leganés, equipo que marca la zona de descenso.
A falta de pocas jornadas para el final de la temporada, la situación se vuelve crítica y cada partido se convierte en una final para los vitorianos.
Mientras tanto, el Rayo Vallecano sigue soñando con Europa. La victoria lo deja séptimo con 40 puntos, acercándose a los puestos de competiciones internacionales.