En un emotivo homenaje celebrado en la localidad extremeña de San Vicente de Alcántara, se rindió tributo a José María Piris Carballo, el primer niño asesinado por ETA en 1980. Como periodista de alto nivel con fluidez en español y conocimientos de empresa, me complace compartir los detalles de este acto conmemorativo que subraya la importancia de mantener viva la memoria de aquellos que han sufrido las consecuencias del terrorismo.
La Importancia de la Memoria Histórica
La memoria es una herramienta poderosa que nos permite no solo honrar a las víctimas, sino también transmitir a las generaciones futuras la importancia de la paz y la tolerancia. Como bien señaló Jagoba Álvarez Ereño, director de Derechos Humanos, Víctimas y Diversidad del Gobierno Vasco, "mantener viva la memoria es la mayor victoria frente al horror. Estos actos de recuerdo no solo muestran respeto, sino que también se convierten en "actos de memoria" que permiten preservar la historia y evitar que tragedias como esta vuelvan a ocurrir.
Rendir Homenaje a las Víctimas del Terrorismo
El acto organizado por el ayuntamiento de San Vicente de Alcántara contó con la presencia de diversas autoridades y representantes de organizaciones relacionadas con las víctimas del terrorismo. Entre ellos se encontraban la madre de José María Piris, el amigo de la víctima que también resultó herido en el atentado, el presidente de la Asociación Extremeña de Víctimas del Terrorismo, el presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo y el director del Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo.
Durante su intervención, el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, instó a no olvidar el "alto precio que costó conseguir la paz" y reivindicó la lucha diaria por una España "más democrática, tolerante y en paz" como el "mejor homenaje" que se le puede hacer a Piris. Estas palabras resuenan con fuerza, recordándonos que la lucha contra el terrorismo no solo se libra en el pasado, sino que continúa en nuestro presente.
El Legado de José María Piris: Un Llamado a la Reflexión
La tragedia de José María Piris, un niño de 13 años asesinado por ETA, conmueve a todos los presentes y nos recuerda la crueldad inherente al terrorismo. Como bien expresó el delegado del Gobierno, "si el terrorismo es una pesadilla, con centenares de víctimas, los asesinatos de niños lo lleva todavía más lejos. Es la acción más despreciable que puede hacer la condición humana".
Este acto de homenaje a José María Piris no solo honra su memoria, sino que también nos llama a la reflexión y al compromiso inquebrantable con la justicia, la paz y la tolerancia. Es nuestro deber como sociedad mantener vivo el recuerdo de estas víctimas, no solo para rendirles tributo, sino también para inspirar a las generaciones venideras a construir un futuro donde el diálogo y la empatía prevalezcan sobre la violencia y el odio.







