Las Islas Baleares se han visto sacudidas por una oleada de tormentas que han arreciado en las últimas horas, dejando un rastro de vientos huracanados y lluvias intensas a su paso. Esta situación meteorológica, provocada por la llegada de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), ha puesto en alerta a las autoridades y a la población de la región.
La tormenta, que comenzó su recorrido por las Pitiusas (Ibiza y Formentera), ha atravesado posteriormente Mallorca, causando estragos e interrumpiendo la actividad cotidiana. Según los reportes de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se han registrado rachas de viento superiores a los 90 kilómetros por hora en diversas zonas de la isla, como Santa Maria, Puerto de Sóller, Son Bonet y Cabrera.
El Azote de la Tormenta en Mallorca
La llegada de la tormenta a Mallorca se produjo alrededor de las 11:00 horas de este miércoles, y sus efectos se han extendido hasta las 14:00 horas, afectando principalmente al interior, norte y oeste de la isla. Los fuertes vientos y las lluvias intensas han obligado a las autoridades a tomar medidas de precaución, como el cierre del puerto de la Savina en Formentera.
Además, en Cala Saona, nueve ocupantes de un velero tuvieron que ser rescatados después de que la embarcación colisionara contra unas rocas debido a las inclemencias del tiempo. Estos incidentes ponen de manifiesto la gravedad de la situación y la necesidad de extremar las precauciones en la navegación y la realización de actividades al aire libre durante este período de condiciones meteorológicas adversas.
Mallorca y Menorca: Epicentros de la Tormenta
Mientras Mallorca ha sido el principal foco de la tormenta, la isla de Menorca también ha experimentado su propia dosis de inestabilidad climatológica. Según los informes de la Aemet, en Menorca se han formado tormentas, aunque de menor entidad que las registradas en Mallorca.
No obstante, las autoridades han advertido que las tormentas que actualmente atraviesan Mallorca podrían llegar posteriormente a Menorca, por lo que es fundamental mantener una vigilancia constante y estar preparados para afrontar cualquier eventualidad.
La DANA que ha afectado a las Baleares es un fenómeno meteorológico que suele traer consigo lluvias intensas, vientos huracanados y descensos de temperatura, lo que ha obligado a las autoridades a activar los protocolos de emergencia y a mantener informada a la población sobre la evolución de la situación.
En resumen, las Islas Baleares se enfrentan a un período de intensa actividad meteorológica, con tormentas que han causado daños y alteraciones en la vida cotidiana de los habitantes de la región. Las autoridades y los servicios de emergencia trabajan de manera coordinada para mitigar los efectos de esta situación excepcional y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.