La población alicantina de Teulada se enfrenta a una situación preocupante a causa de la sequía que azota la región. El Ayuntamiento ha calificado el agua como no apta para el consumo en diferentes zonas de la localidad, lo que ha generado una gran inquietud entre los vecinos y los negocios de la zona.
La escasez de lluvia está teniendo un impacto significativo tanto en los hogares como en la actividad económica de la zona. Los residentes y empresarios se enfrentan a retos diarios para adaptar sus rutinas y operaciones a esta nueva realidad de escasez hídrica.
El Impacto de la Sequía en los Hogares y la Hostelería
Los vecinos de Teulada se ven obligados a hacer ajustes en su vida cotidiana debido a las restricciones impuestas por el Ayuntamiento. Algunas familias han tenido que recurrir al agua embotellada para el consumo, lo que representa un gasto adicional para los hogares. Una vecina de una urbanización comenta que tradicionalmente el agua ha sido "un poquito salada", pero ahora la situación ha empeorado, ya que no pueden utilizarla ni para hervir ni para guisar.
La hostelería también se ve afectada por esta crisis hídrica. Los propietarios de negocios como cafeterías han tenido que cambiar al agua embotellada para el café, lo que supone un gasto extra para sus establecimientos. Asimismo, los establecimientos temen que la situación empeore durante el verano, cuando la población flotante de turistas y familias con segunda residencia en Moraira aumenta significativamente.
Los Desafíos de los Agricultores Ante la Sequía
La falta de lluvia no solo afecta a los hogares y negocios, sino también a los agricultores de la zona. Estos profesionales del campo lamentan que sus cultivos se encuentran "al borde de la muerte" debido a la escasez hídrica.
Un agricultor explica que, aunque tradicionalmente sus viñas han sido de secano, este año han tenido que instalar un sistema de goteo para intentar salvar sus plantas. Sin embargo, señala que "llueve menos que en el desierto" y que en un año han caído solo 50 litros, lo que es "inviable" para que las plantas puedan sobrevivir.
Otro profesional del campo coincide en el diagnóstico, indicando que la situación es "crítica" y que los campos se encuentran "al borde de la muerte". Advierte que el problema no se limita a la cosecha de este año, sino que también afectará a la del próximo año, ya que las plantas que logren salvar tendrán una carencia hídrica, lo que probablemente se traduzca en una baja producción.
En resumen, la sequía que azota a Teulada está generando una gran preocupación entre los vecinos, los negocios y los agricultores de la zona. Desde los hogares hasta las empresas, todos se ven obligados a adaptarse a esta realidad de escasez hídrica, lo que está teniendo un impacto significativo en la vida cotidiana y la actividad económica de la localidad. Ante este desafío, la población de Teulada se enfrenta a la incertidumbre de cómo hacer frente a las consecuencias a corto y largo plazo de esta crisis ambiental.
