La Compañía Siderúrgica Huachipato (CSH), filial de CAP, una de las principales empresas mineras de Chile, ha anunciado el inicio de un proceso de suspensión indefinida de su actividad siderúrgica. Esta decisión se ha visto motivada principalmente por la incapacidad de CSH de traspasar a precio las sobretasas recomendadas por la Comisión Antidistorsiones, lo que la ha hecho económicamente inviable en su forma actual.
Ante esta noticia, el Gobierno de Chile ha expresado su lamento por el impacto laboral que tendría esta decisión, calificándola de «lamentable» y «muy devastadora» para la región del Bío Bío. El ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau, ha criticado la «acción irresponsable» de la empresa, señalando que no ha tenido el compromiso social necesario y que la implicación será «desastrosa» para miles de empleos.
Impacto Financiero y Estratégico de la Suspensión de Actividades
La suspensión de las operaciones siderúrgicas de CSH tendrá un impacto financiero significativo para el Grupo CAP. Se espera que el efecto en caja oscile entre 120 y 140 millones de dólares (109 y 128 millones de euros) en pérdidas en los próximos 12 meses. Además, el impacto contable se estima entre 320 y 350 millones de dólares (292 y 320 millones de euros) en pérdidas, debido a un castigo por deterioro de los activos siderúrgicos de CSH.
Sin embargo, la compañía espera que esta decisión permita una mejora en los resultados futuros consolidados del Grupo CAP, considerando las pérdidas históricas de CSH, que ascendieron a 122 millones y 385,5 millones de dólares (111 y 352 millones de euros) en los años 2022 y 2023, respectivamente.
Tras conocerse la noticia, las acciones de CAP han experimentado un aumento del 6,67% en el mercado bursátil de Santiago de Chile, lo que refleja la percepción positiva de los inversores sobre esta decisión estratégica.
Esfuerzos Gubernamentales y Llamado a la Responsabilidad Empresarial
El Gobierno de Chile ha manifestado su compromiso con la reactivación de la industria siderúrgica y ha hecho un llamado a las empresas para que reconsideren la situación y se pongan de acuerdo en busca de una solución que permita aprovechar las condiciones favorables que el país ha creado para su desarrollo.
Según el ministro Grau, el Gobierno y los sindicatos han realizado un esfuerzo importante para generar las condiciones que permitieran que estas empresas se pudieran desarrollar de buena manera, por lo que ahora son las empresas las que «le han fallado al país».
En este sentido, el ministro ha instado a las empresas a que se sienten a conversar y resuelvan este problema para poder aprovechar las condiciones muy favorables que les ha creado el país para su desarrollo, haciendo énfasis en la necesidad de un mayor compromiso social por parte de las compañías.