Durante los primeros seis meses del año, el indicador de estrés de los mercados españoles se ha mantenido en una situación de bajo riesgo, según el informe de estabilidad financiera publicado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Este indicador, que oscila entre 0 y 1, se ubicó por debajo del umbral de 0,27 que separa el estrés bajo del medio, alcanzando un mínimo anual de 0,15 en el mes de marzo.
Sin embargo, la evolución del indicador a lo largo del segundo trimestre ha sido más irregular, en parte debido a las caídas de las cotizaciones y a un leve aumento de la volatilidad en los mercados. A principios de julio, el indicador se situaba en 0,20, manteniéndose todavía en un nivel de bajo estrés.
LOS MERCADOS MONETARIO Y DE BONOS, LOS MÁS AFECTADOS
Los mercados monetario y de bonos han presentado los mayores niveles de estrés, como consecuencia de la mayor volatilidad de los tipos de interés y de la ampliación de algunas primas de riesgo. Asimismo, el mercado de intermediarios financieros, es decir, el de las operaciones bancarias, también se ha visto afectado por las «incertidumbres de tipo nacional y europeo«. En general, el grado de correlación del sistema se mantiene en niveles medio-altos.
Por otro lado, la CNMV destaca que las principales fuentes de riesgo están relacionadas con el mantenimiento del riesgo geopolítico en niveles elevados a nivel internacional, así como con la prolongación de los tipos de interés en valores altos en comparación con los años anteriores, a pesar de las expectativas de recortes.
En contraste, la incertidumbre relacionada con la evolución de la economía española se ha reducido, tras el dinamismo registrado por los principales indicadores y las revisiones al alza en los pronósticos de crecimiento publicados por las instituciones de referencia. No obstante, todavía existen dudas sobre el mantenimiento del crecimiento observado en algunos sectores de la economía española, y se mantienen las vulnerabilidades asociadas a las finanzas del sector público.
NUEVOS RIESGOS ASOCIADOS A LAS FINANZAS DIGITALES
La CNMV considera conveniente seguir monitorizando los riesgos que tienen las nuevas tecnologías, los cibernéticos y la ciberseguridad, así como los derivados del uso de la inteligencia artificial generativa en el ámbito de las finanzas.
En cuanto a los criptoactivos, la CNMV destaca la aprobación en EE.UU. de los primeros ETF sobre bitcoin, lo que puede acentuar la interconexión entre este ámbito y el sistema financiero tradicional, si bien este riesgo se mantiene dentro de un nivel reducido.
Por su parte, los mercados financieros de renta variable, que habían comenzado el año con revalorizaciones notables, modificaron su rumbo en meses posteriores debido a la constatación de que las rebajas de tipos de interés esperadas serían de una cuantía inferior y más tardías de lo previsto inicialmente, así como a la permanencia de diferentes incertidumbres de tipo geopolítico.
No obstante, el Ibex 35 acumula una revalorización del 8,3% en el primer semestre de este año, situándose en el rango alto de variaciones de entre los índices europeos.
En los mercados de deuda, los rendimientos de los activos a plazos más largos han mostrado una tendencia alcista que responde al cambio sobre las expectativas de tipos de interés, mientras que las primas de riesgo también han aumentado, aunque de forma más leve y en las semanas centrales del año, por algunas incertidumbres en el plano político y fiscal.
En el ámbito de la gestión de activos, ha continuado el aumento del ahorro de los hogares españoles, que reduce «sensiblemente» la brecha con el ahorro medio de la zona euro, y la preferencia por los activos ligados a los tipos de interés: depósitos a plazo, deuda soberana y fondos de inversión de renta fija.
En este último ámbito de la inversión colectiva, destaca una nueva expansión del patrimonio del sector, originada tanto por las suscripciones netas de los partícipes como por la revalorización de la cartera. Además, sigue en aumento la participación de los inversores minoristas en los mercados de renta variable, que se situó en el 7,9% del total de las compras y el 9,7% del total de las operaciones de venta contabilizadas en el primer semestre de este año.
LOS PRINCIPALES RIESGOS A MONITORIZAR
Según la evaluación de la CNMV, los riesgos financieros más importantes en estos momentos son el riesgo de mercado, sobre todo en el ámbito de la renta variable -ya que en renta fija se han atenuado-, y el riesgo de crédito, como consecuencia del mantenimiento de los tipos de interés en niveles relativamente elevados. Asimismo, continúa siendo importante el riesgo de contagio.
En el ámbito de la intermediación financiera no bancaria, la evaluación del riesgo de liquidez y de apalancamiento no revela ninguna vulnerabilidad relevante en términos de estabilidad financiera, según la conclusión de la CNMV.