En una conmovedora revelación, la Compañía de Jesús en Cataluña ha dado un paso crucial al ampliar el alcance de la transparencia sobre los abusos sexuales cometidos dentro de sus instituciones. Este movimiento, que llega décadas después de los primeros reportes, marca un giro significativo en el abordaje de esta dolorosa crisis.
La institución ha registrado un total de 145 denuncias por abusos sexuales perpetrados por 29 religiosos y 15 laicos desde 1948. Para romper con el silencio que ha envuelto este escándalo, el delegado y portavoz de los jesuitas en Cataluña, Pau Vidal SJ, ha procedido a leer públicamente los nombres de 14 de los victimarios, aquellos contra quienes se ha abierto un proceso judicial ordinario o canónico.
Revelación de Nombres y Cifras Alarmantes
En una rueda de prensa, los jesuitas de Cataluña presentaron los resultados de un análisis exhaustivo realizado en colaboración con el bufete de abogados Roca Junyent y otros profesionales externos. Este estudio ha arrojado datos estremecedores sobre los abusos cometidos en escuelas y otras instituciones de la compañía en la región.
Entre los nombres revelados, destacan los de Lluis Tor, con 25 denuncias, y Francesc Peris, con 24 denuncias. Estas cifras ponen de manifiesto la gravedad y el alcance del problema que la institución ha enfrentado durante décadas. Pau Vidal ha señalado que «hasta ahora no habíamos dado nombres», pero que esta decisión responde a la «voluntad de romper el silencio» que ha rodeado estos casos.
Compromiso con la Transparencia y la Justicia
La divulgación pública de los nombres de los victimarios representa un paso audaz y necesario en el camino hacia la sanación y la justicia para las víctimas. Al asumir esta responsabilidad, los jesuitas de Cataluña demuestran un firme compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas, dos elementos fundamentales para abordar adecuadamente este tipo de abusos.
Más allá de la lectura de los nombres, la institución ha colaborado estrechamente con el bufete de abogados Roca Junyent y otras entidades externas para llevar a cabo un análisis exhaustivo de los casos. Este esfuerzo por recopilar y analizar la información de manera rigurosa refleja la seriedad con la que los jesuitas están abordando esta crisis.
Hacia una Cultura de Prevención y Protección
Si bien el reconocimiento de los hechos y la identificación de los victimarios representan un importante avance, el verdadero desafío radica en construir una cultura institucional que garantice la prevención de futuros abusos y la protección de los miembros más vulnerables de la comunidad.
Los jesuitas de Cataluña deben continuar trabajando en la implementación de sólidos protocolos de denuncia, investigación y acompañamiento a las víctimas. Además, la capacitación y sensibilización del personal, tanto religioso como laico, será crucial para crear entornos seguros y libres de cualquier tipo de abuso.
En conclusión, esta revelación de los jesuitas de Cataluña marca un momento decisivo en el abordaje de los abusos sexuales dentro de la institución. La transparencia, la rendición de cuentas y el compromiso con la justicia y la protección de las víctimas deben ser los pilares fundamentales de la respuesta de la Compañía de Jesús ante esta dolorosa crisis. Solo a través de estos esfuerzos podrán los jesuitas reconstruir la confianza y sanar las heridas de quienes han sufrido tanto.