El presidente de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, ha trasladado este miércoles al del Gobierno, Pedro Sánchez, su demanda de una financiación singular para Cataluña, así como culminar acuerdos previos como la quita de 15.000 millones de euros del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).
Fuentes del Ejecutivo catalán han explicado que Aragonès ha defendido ante Sánchez que Cataluña necesita un nuevo modelo de financiación, que sea «justo y propio», y le ha emplazado a moverse en esta cuestión.
Una Nueva Financiación Justa y Propia para Cataluña
El encuentro también ha servido para analizar el estado del cumplimiento de acuerdos pendientes entre la Generalitat y el Gobierno, y el presidente catalán ha pedido acelerar este capítulo para lograr el máximo de acuerdos posibles.
Pese a resaltar que ya se cumplen acuerdos previos como el traspaso de Rodalies o el traspaso del Ingreso Mínimo Vital (IMV), ha constatado que hay otros que deben culminarse como la condonación de los 15.000 millones del FLA y el impulso y financiación del proyecto para la instalación en Cataluña de un centro tecnológico de producción de chips (Innofab).
Además de constatar que es el primer encuentro entre ambos después de la aprobación de la Ley de Amnistía, Aragonès ha emplazado a Sánchez a «seguir avanzando en la resolución del conflicto político entre Cataluña y el resto de España».
Avances Pendientes en la Resolución del Conflicto Político
El presidente catalán ha resaltado la importancia de lograr acuerdos concretos y tangibles en materia de financiación y traspaso de competencias. Cataluña necesita una financiación justa y propia que le permita desarrollar su potencial económico y social, y el Gobierno debe mostrar su compromiso con la resolución del conflicto político.
Asimismo, ha destacado la necesidad de acelerar el cumplimiento de acuerdos previos, como la condonación de la deuda del FLA, para generar confianza y avanzar en el diálogo entre la Generalitat y el Gobierno central. Estos avances son cruciales para construir una relación más estable y productiva entre Cataluña y el resto de España.
En conclusión, la reunión entre Aragonès y Sánchez ha sido un paso importante, pero queda mucho trabajo por hacer para alcanzar una solución duradera al conflicto político y lograr una financiación justa y adecuada para Cataluña. El diálogo y la voluntad de avanzar en acuerdos concretos serán fundamentales en los próximos meses.