Las noticias sobre la entrada en concurso de acreedores de las tres empresas propietarias del 78% de los centros de depilación láser y medicina estética Único han sacudido el sector. Como periodista de alto nivel, analizaré en detalle esta situación y sus implicaciones para los consumidores.
Colapso de un Modelo de Negocio Basado en Franquicias
Las empresas La Gavia Asesores SLU, La Gavia Asesores Médico SLU y La Gavia Tenerife SLU, que operaban bajo la marca Único, han dado el paso de declararse en concurso de acreedores. Estas tres compañías reconocen tener un total de 115 centros de depilación láser y medicina estética repartidos por todo el país, de los cuales el 78% son propios y el 22% son franquicias.
Esta situación afecta directamente a los centros de propiedad de las empresas matriz, mientras que las franquicias podrían seguir operando de forma independiente. Sin embargo, la asociación de consumidores Facua ya ha alertado del cierre progresivo de establecimientos en varias comunidades autónomas.
Protección de los Derechos de los Consumidores
Para los clientes de los centros Único afectados, es crucial conocer si su establecimiento pertenece a la empresa matriz o a una franquicia. Facua recomienda revisar la denominación social de la empresa en los contratos suscritos, de modo que si aparece alguna de las tres compañías en concurso, se verán afectados por este proceso.
En este sentido, la asociación de consumidores aconseja a los usuarios solicitar su historial personal y conservar toda la documentación relativa a los pagos y contratos, con el fin de poder reclamar el crédito correspondiente a la parte del tratamiento no realizado.
Además, si los tratamientos se han financiado a través de una entidad vinculada, los afectados deben presentar una reclamación a dicha entidad financiera, exigiendo la paralización del cobro de los recibos.
Necesidad de una Regulación Más Estricta
Facua también señala que, si algún consumidor considera haber sido víctima de estafa, puede presentar una denuncia ante las autoridades competentes. Asimismo, la asociación critica que el Gobierno no haya realizado ninguna modificación en la normativa que regula este tipo de clínicas, con el fin de asegurar una mayor protección de los derechos de los consumidores.
En conclusión, el concurso de acreedores de las empresas propietarias de la mayor parte de los centros Único pone de manifiesto la fragilidad de un modelo de negocio basado en la expansión a través de franquicias y la necesidad de una regulación más estricta en este sector. Los consumidores afectados deben estar alerta y hacer uso de todos los mecanismos legales a su alcance para salvaguardar sus derechos.