La mayoría de las galaxias no existen de forma aislada, sino que experimentan fusiones con otras debido a la fuerza gravitacional. Estas fusiones tienen un impacto drástico en las galaxias, modificando su masa, tamaño, forma e incluso su estructura interna. Sin embargo, hasta ahora, ha sido difícil determinar con precisión cuántas fusiones ha experimentado una galaxia en el pasado y si estas fueron entre galaxias de tamaños similares o muy diferentes.
Un equipo de investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) ha utilizado una técnica innovadora basada en inteligencia artificial para estudiar cómo se forman las estrellas en las galaxias. Analizando 10.000 galaxias cercanas, han descubierto que la mayoría de las estrellas nacen dentro de su propia galaxia, y que las fusiones galácticas, aunque importantes, no son la principal fuente de nuevas estrellas. Además, el estudio revela que las galaxias más masivas se ven más afectadas por estas fusiones.
El Papel de las Fusiones en la Evolución Galáctica
Las diferencias en las órbitas y composiciones químicas de las estrellas de la Vía Láctea sugieren que estas tienen orígenes cósmicos variados, lo que proporciona pistas sobre la historia de las fusiones de galaxias. Sin embargo, el número de estrellas originadas por fusiones sólo se ha medido en un pequeño número de galaxias externas, lo que evidencia la falta de estudios exhaustivos sobre el efecto de las fusiones en una muestra representativa de galaxias.
Al combinar simulaciones cosmológicas e inteligencia artificial, los investigadores del IAC han podido analizar 10.000 galaxias cercanas para determinar qué porcentaje de sus estrellas se formaron a partir de fusiones con otras galaxias. Los resultados revelan que sólo el 20 por ciento de la masa estelar de las galaxias actuales es el resultado de fusiones pasadas, por lo que la mayoría de las estrellas del Universo actual se formaron internamente.
Además, el estudio muestra que las galaxias más masivas obtienen hasta entre un 35 y un 40 por ciento de su masa estelar a través de fusiones, mientras que las galaxias con masas estelares bajas forman casi todas sus estrellas de manera interna. Esto sugiere que las fusiones afectan más profundamente a las galaxias más masivas que a las menos masivas.
Implicaciones y Nuevos Retos
Este estudio proporciona nuevas pistas sobre la compleja historia de las galaxias y su evolución a lo largo del tiempo. La capacidad de explorar la historia de las fusiones de galaxias podría ayudar a comprender mejor cómo se forman y evolucionan las galaxias, investigando si las fusiones contribuyen a la creación de tipos específicos de galaxias o ponen en marcha procesos esenciales, como intensos estallidos de formación estelar o el incremento de la actividad de los Núcleos Galácticos Activos.
Sin embargo, los investigadores advierten que las simulaciones utilizadas para este estudio pueden ser inexactas y tener errores, especialmente cuando se trata de entender fenómenos complejos a pequeña escala.
Por lo tanto, el siguiente paso del equipo es ampliar el estudio a galaxias más lejanas, lo que permitiría seguir la progresión de las fusiones y evaluar su contribución a la masa estelar de una galaxia en las distintas etapas evolutivas del Universo. Estos avances ayudarían a comprender cómo afectan las fusiones galácticas a la evolución de las galaxias a lo largo del tiempo cósmico, arrojando luz sobre su papel en la formación de la diversidad de estructuras y propiedades galácticas observadas en la actualidad.