La libertad de elección lingüística en las aulas de las Islas Baleares ha sido objeto de un intenso debate y enfrentamiento entre las autoridades educativas y los padres que buscan garantizar este derecho.
Según los datos revelados por la organización «Escuela de Todos», entre el 16% y el 23% de las familias de Mallorca e Ibiza han elegido el castellano como lengua de enseñanza para sus hijos, a pesar de lo que la organización considera una «pasividad» y «falta de promoción» del derecho a elegir por parte de la Conselleria de Educación y Universidades.
La publicación de estos porcentajes en pleno verano, en una «nota informativa emitida un domingo de finales de julio«, ha sido interpretada por «Escuela de Todos» como un intento de «esconder» estos resultados y minimizar su impacto. Esta organización ha denunciado que muchos centros concertados han «evitado incluir las dos famosas casillas» en los impresos de matrícula, lo que dificultaría el ejercicio del derecho a elegir la lengua de enseñanza.
EL PAPEL DE LAS ENTIDADES ADHERIDAS A ESCUELA DE TODOS
A pesar de los «obstáculos» y la «nula promoción» del derecho a elegir lengua por parte de la Administración, así como la «agresiva oposición» de algunos sindicatos «nacionalistas e independentistas«, Escuela de Todos y las entidades que la integran, como PLIS (Plataforma por la Libertad de Enseñanza en las Islas) y Societat Civil Balear (SCB), han logrado llevar a cabo una campaña informativa que ha permitido que entre el 23,5% y el 30% de las familias de Ibiza y Formentera, y entre el 15,7% y el 20% de las de Mallorca, hayan elegido el castellano como lengua de primera enseñanza.
Estas entidades han celebrado que, a pesar de las dificultades, se haya «conseguido abrir una grieta en el muro de la inmersión obligatoria«, lo que consideran un importante logro en la lucha por la libertad de elección lingüística.
Sin embargo, advierten que estarán vigilantes para que no se produzca «ningún tipo de discriminación» entre los alumnos que hayan elegido catalán o castellano como lengua de aprendizaje, y que se respete la normativa vigente que establece un mínimo de seis horas y un máximo de 16 horas de enseñanza en castellano.
LA RESPONSABILIDAD DE LA CONSELLERIA DE EDUCACIÓN
Escuela de Todos considera que la responsabilidad de esta situación recae en la Conselleria de Educación y Universidades, al no haber promovido adecuadamente el derecho a elegir lengua de enseñanza y no haber garantizado que los centros informaran correctamente a las familias sobre este derecho.
La organización ha señalado que «no informar supone pretender que la inmersión obligatoria siga vigente«, lo que a su juicio vulnera la Ley de Normalización Lingüística, que reconoce el derecho a elegir la lengua de primera enseñanza.
Escuela de Todos ha exigido al conseller de Educación que se asegure de que no se produzca ningún tipo de discriminación entre los alumnos que han elegido catalán o castellano como lengua de aprendizaje, y que se respete la normativa vigente que establece un mínimo de seis horas y un máximo de 16 horas de enseñanza en castellano. La organización ha advertido que estará vigilante en septiembre para denunciar cualquier discriminación en este sentido.
En definitiva, la batalla por la libertad de elección lingüística en las aulas de Mallorca e Ibiza continúa, con Escuela de Todos y las entidades que la integran luchando por garantizar este derecho frente a lo que consideran una falta de compromiso y promoción por parte de las autoridades educativas. La transparencia y el respeto a la normativa vigente serán clave para que esta lucha tenga éxito y se consolide el derecho de las familias a elegir la lengua de enseñanza de sus hijos.