Las Islas Canarias, bañadas por las aguas del Océano Atlántico, han sido testigo de una creciente preocupación por la seguridad de sus habitantes y visitantes en los espacios acuáticos. Con el Día Mundial para la Prevención de los Ahogamientos a la vuelta de la esquina, la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria se ha convertido en el epicentro de una serie de iniciativas destinadas a educar y concientizar sobre este apremiante problema.
RECLAMANDO UNA NORMATIVA CON DIENTES
Desde el ámbito científico, el director del Museo Élder de la Ciencia y la Tecnología, José Gilberto Moreno, subraya la necesidad de acompañar la educación sobre prevención de ahogamientos con una normativa impositiva que incluya un régimen sancionador. Según Moreno, no se trata simplemente de emitir recomendaciones, sino de establecer leyes claras que deben ser respetadas, como la prohibición de entrar al agua con bandera roja o saltar de cabeza.
Actualmente, solo los municipios de Mogán en Gran Canaria y Adeje en Tenerife cuentan con normativas sancionadoras para quienes incumplan las reglas de seguridad en las playas. El promotor de la asociación ‘Canarias, 1500 km de Costa’, Sebastián Quintana, señala que el 80% de las víctimas de ahogamiento en Canarias se habían introducido en el mar a pesar de las advertencias por fenómenos costeros adversos.
Estos datos alarmantes exigen una respuesta contundente de las autoridades, que permita imponer sanciones a quienes ignoren las señalizaciones y pongan en riesgo su propia vida y la de los demás. Solo así se podrá lograr que la población respete las normas y actúe con el sentido común necesario en días de fuerte oleaje.
EDUCACIÓN Y SIMULACROS PARA SALVAR VIDAS
En el marco del Día Mundial de Prevención de Ahogamientos, las autoridades de Las Palmas de Gran Canaria han organizado una serie de actividades que buscan sensibilizar a la población y brindar herramientas para actuar de manera efectiva en situaciones de emergencia.
El 25 de julio, se proyectará el documental ‘Desahogo’ en el Museo Élder, dirigido especialmente a 150 menores inmigrantes, ya que Quintana señala que «muchos de estos niños han perdido la vida» en los peligrosos trayectos en patera.
Un día después, el 26 de julio, se realizará un taller con niños de las escuelas de surf para que aprendan a recuperar a personas en parada cardiorrespiratoria. El experto en medicina de urgencias, Juan Ramón Viera, considera «súper importante» que los primeros auxilios se conviertan en una «necesidad» para toda la población.
Además, en esa misma jornada, Cruz Roja y el Gobierno de Canarias, a través del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), llevarán a cabo simulacros de rescate para poner a prueba los protocolos de actuación en situaciones de emergencia.
UN LLAMADO A LA RESPONSABILIDAD
El director de Presidencia del Cabildo de Gran Canaria, Pablo Rodríguez, resalta la importancia de estas iniciativas, ya que los ahogamientos son un tema que «afecta a todos» en un archipiélago rodeado por el mar. Rodríguez subraya que el océano, a pesar de ser el sustento de la vida de los canarios, también puede ser un «medio hostil» que se ha «llevado demasiadas vidas» por la falta de respeto a las normas.
Ante esta realidad, Rodríguez anima a los ciudadanos a mantener siempre precaución y respeto por el mar, reconociendo que los datos de ahogamientos son «absolutamente desgarradores«. Sólo a través de una responsabilidad colectiva, la educación y el cumplimiento de las normas, se podrá reducir la trágica cifra de vidas perdidas en las aguas de las Islas Canarias.