En una mañana de preocupación y alerta, los residentes de un edificio en la calle Cobos número 19 de Cádiz capital se vieron obligados a abandonar sus hogares, así como la guardería ubicada en el mismo inmueble, tras el colapso y caída parcial del forjado de un piso de la segunda planta que se encontraba en obras de rehabilitación.
Este incidente puso de manifiesto la importancia de la seguridad en las obras de construcción y la necesidad de una supervisión rigurosa para prevenir este tipo de accidentes. Las autoridades competentes actuaron con prontitud para garantizar la seguridad de los ocupantes y evaluar los daños causados.
Inspección y Hallazgos Tras el Derrumbe
Tras la llegada de los efectivos de bomberos, se realizó una inspección detallada del inmueble. Los bomberos constataron el derrumbe y comprobaron el mal estado del forjado. Además, verificaron el estado general de la finca, encontrando diversas patologías que fueron comunicadas al personal técnico de la Delegación Municipal de Urbanismo.
Como medida preventiva, se optó por el desalojo de los residentes y ocupantes de las viviendas del ala izquierda de la casa, así como de la guardería situada en el local bajo. La caída de material del forjado colapsado había marcado las vigas de la estancia inferior, un local sin uso pero situado sobre la guardería.
Los técnicos de Urbanismo y de la propiedad realizaron un reconocimiento exhaustivo de los forjados del local de la guardería, el piso primero y el segundo. Comprobaron que en dos de ellos se habían colocado coronas estructurales metálicas y que en el piso segundo era necesario apuntalar una viga que había quedado descabezada sin caer.
Medidas de Seguridad y Pasos a Seguir
Ante esta situación, Bomberos y Urbanismo acordaron con la constructora la realización de los trabajos necesarios de seguridad a la mayor brevedad posible y con las adecuadas medidas preventivas. Estas medidas buscan garantizar la seguridad de los ocupantes y la estabilidad del edificio antes de permitir el regreso de los residentes y la reanudación de la actividad de la guardería.
La prioridad en este caso es asegurar la integridad estructural del inmueble y evitar nuevos incidentes. Los técnicos trabajarán de manera coordinada para implementar las soluciones necesarias y restablecer la normalidad en el edificio lo antes posible.
Este incidente ha puesto de manifiesto la importancia de la supervisión y el mantenimiento adecuado de los inmuebles, especialmente durante los procesos de rehabilitación. Las autoridades y los propietarios deben actuar de manera responsable y diligente para garantizar la seguridad de los ocupantes y prevenir este tipo de accidentes lamentables.
