En un movimiento estratégico para fortalecer la seguridad y la resiliencia de los ecosistemas forestales de España, el Consejo de Ministros ha aprobado recientemente un acuerdo que garantiza el despliegue de un servicio aéreo de apoyo a las comunidades autónomas en la extinción de incendios forestales para la campaña de verano de 2024. Este importante paso evidencia el compromiso del gobierno por salvaguardar uno de los recursos naturales más valiosos del país.
La Administración General del Estado (AGE), a través del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, juega un papel fundamental en el apoyo a las comunidades autónomas en materia de incendios forestales. Esta labor se materializa mediante el despliegue de medios terrestres y aéreos en tareas de prevención y extinción, estableciendo los procedimientos necesarios para la coordinación general de todas las actuaciones en este ámbito.
Una Flota Aérea Robusta para la Lucha Contra Incendios
La AGE cuenta con una flota estatal de 14 aviones anfibios, que se suman a un dispositivo de aeronaves de diversa tipología contratadas a operadores privados, superando las 40 unidades, la mayoría durante el periodo de máximo riesgo (campaña de verano), y en un número más limitado el resto del año.
Estas aeronaves se integran con las 190 unidades que, de manera aproximada, contratan anualmente las comunidades autónomas para el desarrollo de sus competencias propias en materia de extinción de incendios. Esta estrecha colaboración entre los diferentes niveles de la Administración es clave para garantizar una respuesta eficaz y coordinada ante los desafíos que plantean los incendios forestales.
El Acuerdo del Consejo de Ministros: Un Impulso Estratégico
El acuerdo aprobado por el Consejo de Ministros establece la declaración de emergencia para la realización de un servicio con medios aéreos de apoyo a las comunidades autónomas en la extinción de incendios forestales para la campaña de verano de 2024. Este servicio cuenta con un importe máximo de 2.979.240 euros y cinco aviones de carga en tierra.
Esta medida refleja la importancia estratégica que el Gobierno otorga a la protección de los recursos forestales, reconociendo la necesidad de contar con sistemas de respuesta robustos y adaptados a las necesidades cambiantes de cada temporada. Al garantizar el despliegue oportuno de estos medios aéreos, el Gobierno demuestra su compromiso por salvaguardar el valioso patrimonio natural de España y fortalecer la capacidad de las comunidades autónomas para hacer frente a los incendios forestales.