La dimisión de los consejeros de Vox del Gobierno regional de Castilla y León ha sido recibida con una mezcla de alivio y escepticismo por parte del PSOE. En una rueda de prensa celebrada en Burgos, el secretario autonómico del PSOE, Luis Tudanca, ha solicitado al presidente de la Junta y al Partido Popular que den muestras concretas de querer distanciarse de la extrema derecha.
Tudanca ha afirmado que esta medida supone «el fin de una pesadilla» y una «buena noticia», ya que, en su opinión, «la extrema derecha nunca debió llegar a los gobiernos». Sin embargo, el líder socialista ha advertido que, si el PP mantiene los pactos con Vox en los ayuntamientos y no pone fin a las políticas impulsadas por la formación de Abascal, demostrará que sigue siendo «los mismos» y con «las mismas políticas».
Llamado a la Ruptura de Pactos con Vox
El portavoz del PSOE en las Cortes ha instado al PP a «dar pasos» para romper los acuerdos de Gobierno con Vox en municipios como Burgos y Valladolid. Según Tudanca, esto sería una forma de demostrar que el PP quiere «volver a la senda de la cordura» y, en ese caso, los socialistas estarían dispuestos a «pactar por Castilla y León».
Asimismo, Tudanca ha exigido que el Ejecutivo regional ponga fin a «esas políticas que recortan los fondos de cooperación internacional, que restringe los derechos y libertades, que atacan a las mujeres o que lanzan discursos abiertamente machistas, racistas y de odio contra los inmigrantes. El líder del PSOE ha señalado que es necesario eliminar iniciativas como la proposición de Ley de Concordia y la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) de la pirámide de los Italianos, a la que ha calificado como «un monumento homenaje a los fascistas«.
Una Comunidad Intervenida y Frágil
Según Tudanca, la situación en Castilla y León es «complicada» y «compleja«, ya que el Gobierno del popular Alfonso Fernández Mañueco «vuelve a quedar en una enorme debilidad y con una enorme fragilidad». El secretario autonómico del PSOE ha recordado que las decisiones en la Comunidad no se toman en la región, sino que han sido supervisadas por los líderes del Partido Popular, tanto el expresidente Pablo Casado como el actual, Alberto Núñez Feijóo.
En este contexto, Tudanca ha ironizado sobre el hecho de que haya sido el líder de Vox, Santiago Abascal, quien haya terminado por «echar» a la extrema derecha del Gobierno regional, en lugar del Partido Popular. El socialista considera que esta situación debería haberla resuelto el PP, demostrando así su distanciamiento de Vox.
Un Llamado a la Valentía del Alcalde de Burgos
Durante la rueda de prensa, Tudanca estuvo acompañado por el portavoz y cabeza de lista del PSOE en el Ayuntamiento de Burgos, Daniel de la Rosa. El dirigente socialista ha reclamado a la alcaldesa popular, Cristina Ayala, que muestre «valentía» y rompa el pacto con Vox en el Consistorio burgalés.
De la Rosa ha asegurado que el PSOE de Burgos «será aún, si cabe, mucho, mucho más exigente» con Ayala y su equipo de Gobierno, en comparación con la actitud que mantuvieron con el anterior alcalde popular, Javier Lacalle. Esto refleja la firme posición del PSOE de Castilla y León de exigir una ruptura definitiva de los acuerdos con la extrema derecha en todos los niveles de Gobierno.
En resumen, la salida de Vox del Gobierno de Castilla y León ha generado expectativas y cautela entre los socialistas. Mientras celebran el «fin de una pesadilla», exigen al Partido Popular que dé pasos concretos para distanciarse de la extrema derecha y poner fin a las políticas que, en su opinión, vulneran derechos y libertades. El PSOE se muestra dispuesto a alcanzar acuerdos, pero reclama una clara demostración de que el PP ha roto con Vox y sus posturas más radicales.