La transición energética es un tema de vital importancia para nuestro país y para toda Europa. En este contexto, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha realizado importantes declaraciones que merecen ser analizadas con detenimiento.
Imaz ha resaltado la necesidad de valorar al empresario, tanto español como global, que genera beneficios en su compañía, los invierte y da riqueza a la sociedad. Según él, «Necesitamos compañías de éxito, que ganen dinero y que puedan invertir«. Esta visión es fundamental para impulsar el crecimiento económico y la competitividad de nuestro país.
LA IMPORTANCIA DEL EMPRESARIO EN LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA
El consejero delegado de Repsol ha explicado que el empresario es el que crea empleo y el que permite tener un modelo de competitividad, entre otras cuestiones. Ha hecho hincapié en que España necesita un modelo de competitividad basado en la industria, la inversión y la tecnología. «Ese es el modelo de competitividad del país que necesitamos«, ha puntualizado Imaz, añadiendo que para eso la gente tiene que invertir, comprometerse y tener derecho a un legítimo beneficio.
Imaz también ha indicado que, en España, «tendemos a autoflagelarnos, y esto también ocurre con nuestras compañías«. Sin embargo, ha recalcado que todo esto es por los jóvenes que vienen, para que tengan una sociedad con un modelo de vida digno. «Debemos apostar por un modelo de competitividad nacional que trascienda más allá de un partido político o modelo específico», ha explicado.
Por otro lado, Imaz ha incidido en que Repsol tiene la «vocación legítima de liderar el mercado de puntos de recarga del vehículo eléctrico, afirmando que la compañía está haciendo una apuesta «muy fuerte» en esta dirección.
UNA TRANSICIÓN ENERGÉTICA «SOCIAL» Y «TERRITORIALMENTE» JUSTA
Imaz ha defendido que la transición energética debe ser «social» y «territorialmente» justa para todos los sectores productivos, «porque no se ve igual la transición energética desde una empresa de servicios tecnológicos de una gran ciudad, que desde el sector primario de determinadas áreas de España».
Además, ha considerado que esta transición debe estar basada en las capacidades tecnológicas y industriales que hay en España, que son muchas, dado que en el país hay talento, tecnología y magníficas empresas. «Creo que tenemos capacidad entre todos de llevar este reto adelante«, ha confiado.
En este sentido, Imaz ha aplaudido al sector eléctrico español, al que considera «magnífico» y «muy competitivo«, con «magníficas» empresas como Endesa, Iberdrola, Naturgy y EDP. Asimismo, ha considerado que el sector eléctrico europeo ha hecho «muy bien» los deberes de descarbonizar una «parte importante» de la generación eléctrica en Europa, gracias a la tecnología que está desarrollada para ello.
UNA POLÍTICA ENERGÉTICA EUROPEA «AMBICIOSA»
Imaz ha indicado que desde Repsol han pedido una política energética europea porque hay que ser «ambiciosos» en la descarbonización, aunque han aclarado que hacerlo basándose en las capacidades industriales y sin poner en riesgo sectores «importantes«.
«La tarea no es fácil, necesitamos más visiones estratégicas, pero es un buen momento para que en Europa demos un giro para que tengamos una política energética que, además de descarbonizar, esté focalizada en la competitividad de la industria y de los ciudadanos europeos», ha subrayado.
En resumen, las declaraciones de Josu Jon Imaz ponen de manifiesto la importancia del empresario español y su papel clave en la transición energética de nuestro país. Una transición que debe ser social, territorialmente justa y basada en las capacidades tecnológicas e industriales que ya existen en España. Todo ello bajo el paraguas de una política energética europea ambiciosa que impulse la competitividad de la industria y de los ciudadanos.