El atasco de las tuberías de la cocina es algo bastante habitual. Este problema, además de ser una molestia, tiene una solución certera a base de vinagre y bicarbonato de sodio. Pero antes de darte los pasos a seguir, debes saber que un caño tapado puede derivar en malos olores y dificultad para realizar las tareas domésticas, algo que de todas maneras podrás arreglar en un abrir y cerrar de ojos.
El vinagre, un producto que se encuentra en la mayoría de los hogares, puede ser tu gran aliado para desatascar tuberías más rebeldes. Combinado con otro producto doméstico, el bicarbonato de sodio, se obtiene una mezcla potente y eficaz para disolver obstrucciones en las tuberías. Este método no solo es más económico, sino también ecológico, ayudando a mantener un hogar más saludable.
Vinagre más bicarbonato, la mezcla más eficaz
Antes de empezar, asegúrate de eliminar el agua estancada del fregadero. Puedes usar un recipiente o un vaso para retirar el exceso de agua y facilitar la acción del vinagre y el bicarbonato. Ahora puedes aplicar el bicarbonato de sodio en media taza en el desagüe. Puedes ayudarte de una cuchara para asegurarte de que todo el bicarbonato llegue al interior de la tubería y después, agrega el vinagre y vierte lentamente en el desagüe. Notarás que la mezcla empezará a burbujear, ¡Buen síntoma!
Esto es normal y es señal de que la reacción química está trabajando. Debes dejar reposar la mezcla durante al menos 30 minutos y si el atasco es menor, puede que sea suficiente con este tiempo. Para atascos más graves, puedes dejar la mezcla actuar durante toda la noche. Pasado el tiempo de espera, hierve una olla de agua y ponla con cuidado por el desagüe. El agua caliente ayudará a arrastrar los restos disueltos.
El vinagre hará estragos con las tuberías tapadas
Este truco casero con vinagre es muy eficaz para la mayoría de los atascos comunes en tuberías, pero hay que tener algo en cuenta. Si luego de realizar este procedimiento notas que el fregadero sigue atascado, lo mejor será ponerse en contacto con un experto en la materia. Es posible que el problema sea más grave de lo que parece, ya que puede haber un objeto grande obstruyendo el paso.
Al utilizar vinagre y bicarbonato, evitamos el uso de productos químicos agresivos que pueden contaminar el agua y afectar a la fauna y flora. Además, este método es mucho más barato que comprar especializados o contratar a alguien para problemas menores. Por último, los ingredientes son de uso común y la aplicación del método es sencilla, haciendo que cualquier persona pueda intentarlo sin necesidad de conocimientos previos en fontanería, ¿Te animarás?
