Cómo organizar tu rutina de meditación nocturna: descanso profundo y reparador

Muchas veces regresamos del trabajo extremadamente cansado, pero al no podernos dormir recurrimos a la meditación, la cual puede relajarte a niveles que no imaginas. Claro, para llegar a ese punto se necesitan años de práctica y una concentración al máximo, despegándose de distracciones tales como el teléfono móvil, todo tipo de pantallas y otras personas.

Es por eso que meditar antes de dormir es una de las actividades más eficientes para evitar el insomnio. Nos ayudará de gran manera a sentirnos seguros, relajar nuestro cuerpo, enfocar nuestra mente en dormir dejando de lado otro tipo de pensamientos y reducir el ritmo cardíaco; entre otros beneficios. Ahora bien, no todos saben hacerlo y a continuación te daremos algunos consejos.

Ideas para relajar tu cuerpo y hacer una meditación eficiente

Ideas Para Relajar Tu Cuerpo Y Hacer Una Meditación Eficiente

En primer lugar se debe elegir el lugar adecuado para llevar a cabo esta actividad. Muchos eligen su propio dormitorio, ya que tras relajarse simplemente se acuestan a dormir. Sin embargo, en lo posible se recomienda destinar un sitio de la casa que sea exclusivamente para meditar. En primera medida, crear un ambiente relajado te será de gran ayuda, aislándote del mundo exterior.

Sin sonidos que generen distracción, se recomienda además una luz bastante tenue y desde ya no interrumpir la sesión por nada del mundo. Bombillos de bajo consumo o velas aromáticas te darán una sensación bastante relajada, sobre todo este segundo ítem, ya que la aroma terapia también libera nuestras tensiones. Las mismas estimulan el cerebro y la manzanilla o lavanda son ideales.

Tras la meditación ya estás listo para un descanso profundo

Tras La Meditación Ya Estás Listo Para Un Descanso Profundo


Con estos pasos realizados ya estás muy cerca de cumplir el objetivo. Recuerda también de sentarse a meditar en un sitio cómodo, apoyando una almohada detrás de ti, si te apoyas contra una pared, regulando además tu temperatura corporal con la ropa que utilices. La rutina puede ir cambiando cada semana, evitando así que se transforme en algo monótono y repetitivo. ¡Busca variantes! Puedes cambiar de ambiente, la fragancia de tus velas o inciensos y a no olvidarse de las sábanas limpias.

Una de las técnicas más efectivas que acompaña la meditación es la correcta forma de respirar. La misma sirve para que nos concentremos en cómo el aire entra a través de nuestra nariz y lo expulsamos por la boca lentamente. Esto nos ayudará a evadirnos de nuestros pensamientos diarios que muchas veces nos atormentan, por lo que cuando termines con todos estos pasos estarás listo para dormir plácidamente.