Las primeras medidas prometidas por Urtasun como nuevo ministro de Cultura

El nuevo Gobierno de coalición incluye algunas caras frescas. Entre los nuevos miembros del Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez como Presidente del Gobierno se encuentra Ernest Urtasun.

Este político catalán es uno de los cinco ministros de Sumar en el Gobierno, compartiendo espacio con Yolanda Díaz, Mónica García, Pablo Bustinduy y Sira Rego.

Después de Díaz, Urtasun es la figura más destacada del partido y asume la cartera de Cultura, sucediendo a Miquel Iceta, cuyas responsabilidades en Educación y Deporte se han dividido, siendo la de Deporte asignada a Pilar Alegría.

Ernest Urtasun, de Cultura, el más destacado de los ministros de Sumar

Ernest Urtasun, nació el 27 de enero de 1982, hace 41 años, en Barcelona y tiene una larga trayectoria política. A los 15 años ingresó en Joves d’Esquerra Verda, una organización ecologista de izquierdas, que se asocia a la Iniciativa per Catalunya Verds (ICV).

Allí llegó a ser coordinador y participó en su integración con Catalunya en Comú, partido que concurrió a las elecciones generales de 2015.

Urtasun ha ocupado así una de las cinco carteras que el PSOE ha cedido a sus socios en el Gobierno, Sumar, para esta legislatura. El esto son Yolanda Díaz, que seguirá como vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social; Pablo Bustinduy, como ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030; Mónica García como ministra de Sanidad y Sira Rego, como ministra de Juventud e Infancia.

Urtasun ya había dado el salto a la política como portavoz de Sumar

Ahora ha dado el salto a la política nacional en las pasadas elecciones generales del 23J, en las que desempeñó las labores de portavoz de Sumar. Sin embargo, no es la primera vez que se le baraja para formar parte del Ejecutivo, ya que en 2019 también era una de las opciones de Unidas Podemos para ocupar el cargo de ministro de Universidades.

También fue uno de los eurodiputados que luchó en Europa contra la ley del Copyright que podría haber limitado la expresión internet, se ha mostrado abiertamente antitaurino y, como muestra de su relación con la cultura, ha escrito en más de una ocasión como colaborador invitado en la revista Rockdelux.

Cultura Urtasun

Antes de las elecciones del 23 de julio, Urtasun fue llamado por Yolanda Díaz para asumir la portavocía de Sumar, marcando su entrada en la política nacional. 

La llegada de Urtasun a Cultura ha alertado al mundo de la tauromaquia, que incluso le ha invitado a una corrida, y apenas aterrizado se ha visto envuelto en una extraña polémica con la Comunidad de Madrid, que le ha acusado de querer desmantelar el Prado por un programa que creó el propio museo hace ya un año para administrar mejor los fondos que tiene en depósito por toda España, en algunos casos desde hace más de un siglo.

El ministro de Cultura quiere ser ‘proteccionista’ y primar al cine español

Urtasun asegura que quiere ser un ministro «proteccionista», que su apuesta es por los derechos al acceso y la práctica de la cultura, que su primera ley será la del Cine y que frente a la censura estará siempre al lado de unos creadores de los que, asegura, conoce bien su precariedad.

Como explica en una entrevista con La Vanguardia, va a «tener que ver los contenidos», lo mismo que el Estatuto del artista, medidas concretas, de trabajo concreto y efectivo por las que pasa de puntillas para explayarse en lo ideológico.

Habla de descentralizar los museos con el eufemismo de que la cultura ha de llegar a todos los rincones de España, como si no llegara, como si no hubiera llegado siempre, como si el hecho de que el Museo del Prado esté ubicado en Madrid fuese un impedimento para que eso suceda, la idea del despiece político de la cultura como la idea de la descolonización de los museos, en línea con las corrientes ‘woke’, la «cultura colonial» que dice que hay que abordar: política e ideología puras.

«Voy a tratar de reimpulsar la ley del Cine»

«Tengo una gran prioridad: la primera ley que voy a tratar de desbloquear es la ley del Cine porque ya gozaba de gran consenso en el sector. Hay cosas por corregir. Me estoy reuniendo con todo el sector para reimpulsarla…», explica el ministro de Cultura.

La última vez que los productores de cine españoles decidieron dar un voto de confianza al Gobierno salieron escaldados. Y hasta emplumados. A última hora, sin avisar y para estupefacción de los socios minoritarios de la coalición, el Ministerio de Cultura decidió cambiar una coma que modificaba la definición de independencia.

De repente, las televisiones privadas pasaban a ser prestadoras de servicios para las plataformas y, en consecuencia, tan independientes como la empresa responsable de, por ejemplo, Creatura, de Elena Martín. Una coma y la productora de Antena 3 o Tele 5 y la de la seleccionada en la Quincena de Realizadores de Cannes quedaban al mismo nivel a la hora de optar al 5% de los ingresos de las operadoras de’ streaming‘ que, según normativa europea, han de invertir en proteger la diversidad cultural.

«Queremos apoyar mucho la creación cultural»

«La cultura va a ser un elemento fundamental de refuerzo de la democracia en nuestro país», dice Urtasun. Y desde ese punto de vista menciona que hay «grandes cosas por hacer»: «En primer lugar, «queremos apoyar mucho la creación cultural«.

Hay un déficit de apoyo. Eso no solo son becas, también son espacios para la creación. Vamos a centrarnos en eso. En segundo lugar, tenemos claro que la cultura es una industria importante de este país».

El Estatuto del Artista

Aprobado hace ya cinco años, en 2018, estas medidas que buscan modificar la normativa laboral, tributaria y de la Seguridad Social relativa a la situación profesional de creadores, artistas y profesionales de la cultura ha estado sometida a constantes retrasos. En 2021, Iceta puso en marcha la comisión interministerial para desarrollar las distintas medidas. Y eso es lo que quiere modificar también Urtasun.

Entre las ya aprobadas se encuentran la compatibilidad del cobro de la pensión de jubilación con la percepción de ingresos por continuar desarrollando actividad artística y la prestación especial por desempleo para los trabajadores culturales por cuenta ajena, que tenía en cuenta por primera vez la intermitencia de contratos en el sector.

Sobre la mesa está por ejemplo la prestación por cese de actividad que reciban los trabajadores autónomos del sector y las acotaciones del mismo, especialmente para los dedicados a las artes escénicas, así como la modificación de las cuotas del autónomos a los profesionales del sector.

El bono cultural joven

La prórroga del Bono Cultural Joven también queda en las tareas para Urtasun, que si sigue el programa de Sumar, proponía la ampliación hasta los 30 años, que podría sustentarse en una propuesta de aumento de los presupuestos en cultura durante los próximos cuatro años en un 1%.